Redacción PH

Integrantes de la Unión Popular de Vendedores y Ambulantes (UPVA) 28 de octubre, encabezados por su líder Rubén Sarabia Sánchez, “Simitrio”, denunciaron amenazas de muerte en su contra, por lo que pidieron una reunión con el gobernador Miguel Barbosa Huerta.

En rueda de prensa los líderes de la organización señalaron a Francisco N, alías “El Caimán” de ejecutar a dos miembros de la UPVA con el único fin de intimidarlos para despojar a la organización de los espacios que mantenían en la Cuchilla.

De acuerdo con Sarabia Sánchez hasta ahora El Caimán ya despojó a sus agremiados de los sanitarios, estacionamiento y control del portón de acceso a La Cuchilla, al mismo tiempo que ha emprendido una campaña de extorsión y amenaza con levantar y golpear a quienes se oponga.

En esta lucha por el control de la zona se enmarcó la muerte de Miguel N, apodado “Barrabás”, quien, hace aproximadamente dos meses, durante la madrugada, fue encadenado de las manos y cuello, paseado por los pasillos de La Cuchilla y su cadáver fue tirado frente al local de su madre en el mercado Hidalgo.

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El segundo caso correspondió a Juan Carlos Sánchez, comerciante del sector de Flores del mercado Hidalgo, cuyo cadáver fue tirado a las puertas de la casa de su padre hace aproximadamente un mes.

Las amenazas de El Caimán se extendieron al resto de líderes de la organización e incluso llegaron a Xihuel Sarabia Reyna, hijo de Simitrio, quien a través de uno de sus integrantes levantado les envió un mensaje de que todo aquel que se oponga será levantado, además que cuentan con “órdenes de su nuevo jefe, que está en la Secretaría de Seguridad Pública del Estado”.

Estas situaciones ya han sido informadas a las autoridades misma que no ha mostrado avances del caso, por lo que insisten en que el gobernador Barbosa los reciba para exponerles los amedrentamientos que están recibiendo de parte de esa banda dedicada al narcomenudeo.