Américo Villarreal Anaya rindió protesta como gobernador constitucional de Tamaulipas este sábado durante una sesión solemne convocada por el Congreso local y a la cual acudió Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación, Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard.

En las inmediaciones del Congreso del Estado, se desplegó un operativo de seguridad que incluye a militares y elementos de la Guardia Nacional.

El gran ausente fue el gobernador saliente, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.

Esta semana, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación confirmó la validez del triunfo de Américo Villarreal como gobernador electo de Tamaulipas.

Por unanimidad, la Sala consideró que no hubo coacción ni vulneración en la cadena de custodia ni a los principios de neutralidad e imparcialidad que argumentaba el Partido Acción Nacional (PAN).

En los últimos tres días, el morenista Américo Villarreal pidió regresar a su escaño en el Senado, luego solicitó hacer caso omiso de dicha solicitud y este miércoles apareció su nombre para llevar a cabo funciones legislativas, por lo que se vio obligado a pedir una nueva licencia de su cargo, misma que le fue concedida.

Sin embargo, la Constitución de Tamaulipas establece en su artículo 79, numeral 4, que para ejercer el cargo de gobernador en dicha entidad no pudo haber ocupado otro cargo en el servicio público o de representación en la Federación o en estados en 120 días previos a la toma de protesta, la cual cuál se llevará a cabo el próximo sábado 1 de octubre.

Villarreal Anaya obtuvo en la elección de junio pasado un total de 710 mil 952 votos, con los que venció al panista César Verástegui Ostos, quien consiguió 628 mil 541.

Con información de López-Dóriga Digital