Redacción

Cuestiona a todos los que lo critican, concentra cada vez más poder en sus manos y la mayoría de las grandes decisiones son sólo suyas, se está convirtiendo en un “caudillo autoritario”, advierte el diario británico Financial Times en su editorial titulado: López Obrador, la nueva figura del autoritarismo en Latinoamérica.

Cuando un Presidente exige ‘lealtad ciega’ de los funcionarios, deberían sonar las alarmas.
Cuando pide el voto popular para enjuiciar a sus predecesores, lanza una andanada contra el organismo electoral independiente y avergüenza públicamente a quienes lo critican, hay buenas razones para sentir miedo

Resalta que aunque el presidente López Obrador fue elegido con una mayoría abrumadora en 2018 en las urnas, con un mandato para buscar una “transformación radical”, el combate a la corrupción, la austeridad en el gobierno y la política económica de “primero los pobres”, no significa un cheque en blanco.

López Obrador no ganó un mandato para desmantelar las instituciones.

La democracia de México ya era frágil y sus órganos públicos débiles, legado de años de poder presidencial sin trabas y el predominio de un solo partido político. Una auténtica reforma progresista habría otorgado mayor autonomía a los estados y municipios, reducido el poder presidencial y reforzado el estado de derecho. En cambio, el autodenominado líder de la ‘Cuarta transformación’ de México ha concentrado un poder aún mayor en sus propias manos. La mayoría de las decisiones importantes son sólo suyas. Las instituciones que se niegan a ceder a su voluntad son el objetivo”, señala el editorial.

El texto también menciona los ataques que han sufrido organismos como el Instituto Nacional Electoral (INE), los periodistas y ambientalistas.

“La autoridad electoral independiente ha sido atacada por el Presidente por ‘nunca haber garantizado elecciones libres’, a pesar de que certificó su aplastante victoria. Los periodistas que menosprecian al presidente pueden esperar ser nombrados, acusados de estar ‘al servicio de los regímenes autoritarios y corruptos’ que lo precedieron, y pidiendo disculpas. Los ambientalistas que critican sus proyectos de infraestructura favoritos, incluida una nueva y costosa línea ferroviaria que atravesará parcialmente el bosque virgen maya, son descritos como lacayos extranjeros a sueldo”.

Sobre la consulta popular para enjuiciar a los expresidentes, el diario británico señala que la Suprema Corte de la Nación (SCJN) cedió a la voluntad de López Obrador.

Su único cambio (de los Ministros) fue reformular la pregunta en la boleta, haciéndola más vaga y eliminando los nombres de los antiguos líderes.

“¿Por qué el señor López Obrador es tan intolerante?”, cuestiona Financial Times y resalta “los escasos logros” que el presidente de México ha tenido a lo largo de los dos años de Gobierno:

Después de casi dos años en el poder, los resultados positivos son escasos, aparte de una modesta reforma de las pensiones. El crecimiento económico se detuvo en su primer año y se pronostica que la recesión de este año en México será la peor de cualquier país importante de América Latina, excepto Argentina. La corrupción y el crimen siguen siendo intolerablemente altos y una respuesta errática al coronavirus ha provocado una de las tasas de mortalidad per cápita más altas del mundo”, dice.

López Obrador, en efecto, está transformando a México, insiste el rotativo, pero no de la forma en que prometió y “a menos de que cambie de rumbo rápidamente, la segunda economía más grande de América Latina corre el riesgo de volver a caer en un pasado más pobre, oscuro y represivo, habitado por los caudillos autoritarios que la región esperaba haber dejado atrás”, finalizó.