La LIX Legislatura se despidió dejando solo 500 mil pesos en la cuenta en la que debería haber 11 millones tan solo para cubrir los gastos de operación de septiembre, mientras que los morenovallistas arrasaron hasta con los focos del los espacios que ocuparon.

Este viernes, José Juan Espinosa Torres, presidente de la Mesa Directiva de la LX Legislatura del Congreso de Puebla, anunció que las tres bancadas de la coalición “Juntos Haremos Historia”, Morena, Encuentro Social y Partido del Trabajo acordaron solicitar auditorías externas a despachos certificados pues solo hay 500 mil pesos en la cuenta del Congreso.

De acuerdo con el neomorenista, tan solo la operación mensual del Congreso es de 11 millones, por lo que será necesario se investigue cómo manejaron los recursos la Mesa Directiva saliente, en la cual dominaron los morenovallistas.

Desde el pasado lunes, el exalcalde de San Pedro Cholula denunció que la legislatura saliente ya había gastado todo el presupuesto asignado para el 2018, incluso los apoyos y ampliaciones que recibieron del gobierno de Antonio Gali Fayad.

Consecuencia de ello, aseveró que la Sexagésima tendría problemas para operar los siguientes tres meses, incluso advirtió que no había recursos para el pago de aguinaldos y otras prestaciones, aunque lo que no esperaban era que tampoco hubiera recursos para terminar septiembre.

Por ello, previó que con la auditoría que solicitarán la legislatura saliente tendrá que dar explicaciones del destino del dinero presupuestado para el funcionamiento del Congreso.

Hasta las placas

En otro tenor, los diputados morenovallistas quisieron emular tanto a los diputados federales y senadores, quienes vaciaron las instalaciones de San Lázaro, por lo cual arrasaron hasta con los focos.

De acuerdo con Francisco Sánchez, reportero de Intolerancia, en un recorrido hecho por el tercer nivel del edificio central del Congreso del Estado, espacio que ocupó la bancada de Acción Nacional por más de ocho años, fue prácticamente desmantelado.

“Con los escritorios sacados de las oficinas, sin que se conozca el destino de los mismos”.

” (…) fue desmontada parte de la estructura que tenían las oficinas, y el área destinada para la recepción se encuentra sin escritorios, incluso hasta los focos y el letrero que tenía el escudo del PAN que decía LIX Legislatura fue desmontado”.

Fuentes al interior le confirmaron que las oficinas de Francisco Rodríguez Álvarez, Pablo Regordosa y Carolina Beauregard, solo conservan algunas sillas en su interior.

En el caso de Beauregard, aseguró que los muebles que tenía se los había comprado a Patricia Leal Islas, quien se los vendió cuando llegó a ocupar su lugar, por lo que desde hace más de 15 días los habría sacado del Legislativo.

En tanto, el personal de base asignado al Congreso fue concentrado en una oficina con un solo escritorio, mientras los espacios del resto del legisladores permanecen bajo llave.

En contraste, los priistas quienes también ya entregaron instalaciones, habrían sido quienes lo hicieron en mejores condiciones y sin llevarse mobiliario que ya estaba.

Sera este sábado cuando la nueva legislatura que tiene mayoría proveniente de la coalición “Juntos Haremos Historia”, tome protesta para el periodo 2018-2021.

Con información de Intolerancia