Fotografía: Reto Diario

El mal diseño y la falta de conectividad hace de las ciclopistas poblanas en un espacio inseguro para los ciclistas, quienes se ven forzados a utilizar el carril de RUTA, como el único espacio seguro, coincidieron activistas en movilidad urbana.

En conferencia de prensa, Juan Andrés Contreras integrante del Consejo Ciclista Poblano y agremiado del Colegio de Urbanistas y Diseñadores Ambientales del Estado de Puebla, señaló que las ciclopistas en la capital poblana están mal diseñadas, son insuficientes y carecen de infraestructura y conectividad, para ser consideradas una alternativa de transporte.

Ejemplo de ello es que, los ciclistas han optado por circular sobre los carriles confinados de la Red urbana de Transporte Articulado (RUTA) porque es amplio y tiene un principio y un fin.

El circular sobre esa vía les procura un poco de mayor seguridad vial, en la ciudad que a nivel nacional es el segundo lugar nacional con el mayor número de peatones y ciclistas fallecidos en accidentes viales.

No obstante son conscientes de que circular sobre esa vialidad esta prohibido, sin embargo es más segura que usar el carril de extrema derecha, el cual es peligroso ya que los conductores no respetan.

Y es que, en lo que va del año se han registrado 26 muertes de ciclistas, por lo que es urgente que se tomen acciones inmediatas para poder garantizar mayor seguridad vial en la capital.

Por lo anterior el próximo 16 de mayo presentarán a los candidatos su Plan de Movilidad para Puebla, con la intención que consideren su propuesta para realizar las modificaciones y tomar las acciones necesarias para mejorar la movilidad en Puebla.

Precisaron que su presentación va dirigida a Miguel Barbosa Huerta y Enrique Cárdenas Sánchez, quienes han mostrado sensibilidad de tratar el tema, en tanto señalaron que Alberto Jiménez Merino, pese a que lo han buscado, no ha mostrado ninguna señal de interés.

Transporte público, en crisis

Su diagnóstico también advierte la urgencia de mejorar el sistema de transporte público en la ciudad y de las estrategias en materia de seguridad vial.

Y es que, el transporte público sigue rezagándose pese a que el 49.7 por ciento de la población de la zona metropolitana se mueve en transporte público.

Son los usuarios quienes se ven obligados a transportarse en unidades obsoletas, en mal estado y sin garantizar seguridad a los usuarios.