Investigadores han identificado el mayor brote de sargazo del mundo, el cual por su gran extensión es visible desde el espacio, de acuerdo con un estudio publicado en la revista Science.

Se trata del “Gran Cinturón de Sargazo del Atlántico” (GASB, por sus siglas en inglés), un brote que se extiende por cerca de 8 mil 800 kilómetros del mar, desde las costas de África Occidental hasta el Golfo de México.

De acuerdo con el equipo de científicos encabezado por Chuanmin Hu y Mengqiu Wang de la Universidad del Sur de Florida (USF), el brote fue observado desde vía satélite y se calcula pesa aproximadamente 20 millones de toneladas.

El término macroalgas se utiliza para referirse a las algas marinas y a otros tipos de algas pluricelulares que generalmente pueden verse a simple vista y son popularmente conocidas como sargazo.

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Su descubrimiento se dio mientras investigaban el fenómeno del sargazo a fondo, pues aunque “en el mar abierto, el sargazo es un hábitat y un refugio esencial para todo tipo de animales marinos”, en cantidades excesivas puede provocar problemas ecológicos y económicos, particularmente si una gran cantidad llega a las costas, como ha ocurrido con más frecuencia en la última década en las costas del Atlántico y del Caribe.

“Cuando una cantidad excesiva de sargazo se apila en las playas, puede ser dañino para el ambiente local, el turismo y los pescadores artesanales, además de convertirse en un problema de salud pública”, dijo Wang.

Deforestación

De acuerdo con los investigadores, el inesperado crecimiento podría estar relacionado con el indiscriminado uso de fertilizantes y el índice de deforestación en la selva del Amazonas.

Y es que la región del Atlántico en conjunto experimentó brotes generalizados de sargazo todos los años, de 2011 a 2018, con la excepción de 2013.

Concorde a su análisis, se observa que la deforestación del amazonas y el uso de fertilizantes en la selva, pudieron ser los principales desencadenantes, pues el océano está recibiendo ese exceso de nutrientes que permite que las algas y sus brotes crezcan a mayor velocidad.

El equipo también descubrió que la circulación del océano desempeña una importante función en la formación del cinturón. Además, se indica en el estudio que, frente a las costas de África Occidental, se presenta una afluencia de agua fría desde las profundidades hasta la superficie, la cual podría aportar los nutrientes que contribuyen al brote.

“Las pruebas del enriquecimiento de nutrientes son preliminares y se basan en una cantidad limitada de datos de campo y otra información ambiental, por lo que necesitamos realizar más estudios para confirmar esta hipótesis”, señala Hu.

Finalmente advierte, que al considerar datos de los últimos 20 años, el “cinturón del sargazo” está a punto de convertirse en una “nueva norma”.