Redacción

El valor de la industria de la construcción se incrementó 2.4 por ciento en comparación con mayo, luego de 14 meses de caídas mensuales consecutivas, pero aún se ubicó 32.3 por ciento por debajo de donde se encontraba en junio del año pasado, informó el martes el Inegi.

Luego de ocho meses de caída, incluyendo la de 12.8 por ciento en abril y 5.7 por ciento en mayo, ambos meses de confinamiento, en junio las horas trabajadas en empresas constructoras se recuperaron un poco al subir 6.4 por ciento; mientras que en términos anuales quedaron 22.2 por ciento por debajo en comparación con junio del año pasado, indicó Julio Santaella, presidente del Instituto Nacional de Estadistica y Geografía (Inegi)

El 12 de mayo, la industria de la Construcción fue declarada actividad esencial, con lo que pudieron reanudarse las labores en este sector intensivo en mano de obra.

En el comparativo mensual, el personal ocupado en esta actividad aumentó 1.1 por ciento, y por tipo de contratación el personal ocupado directamente por las empresas constructoras mejoró 2.7 por ciento -lo que respondió a un avance de 3.3 por ciento en el caso de los obreros y de 1.1% de los empleados-, en tanto que el personal no dependiente de la razón social descendió 8.8 por ciento.

En el incremento de 6.4 por ciento en las horas trabajadas en comparación con mayo, destaca el aumento de 8 por ciento en el caso del personal dependiente y de 0.2 por ciento del no dependiente.

Las remuneraciones medias reales se mantuvieron prácticamente sin cambio, con un aumento de 0.2 por ciento, resultado de una mejora de 0.4% en el caso de los pagados a los obreros y de 0.2 por ciento en las remuneraciones pagadas a los empleados.

En el comparativo anual, el valor real de la producción de las empresas constructoras estuvo todavía 32.3 por ciento por debajo del nivel de junio de 2019, mientras que el indicador de horas trabajadas estuvo 22.2 por ciento detrás y el de personal ocupado 21.3 por ciento.

Solo el indicador de remuneraciones medias reales mejoró 0.8 por ciento en junio del año en curso con relación al mismo mes de un año antes.

En el acumulado enero-junio, la actividad que más valor perdió fue la construcción de obras de ingeniería, con una caída de 28 por ciento frente a 2019 y un retroceso de 33.6 por ciento si solo se compara el valor del mes de junio.

En cuanto al valor de la edificación, la actividad de mayor peso en el sector, la caída semestral fue de 21.4 por ciento frente a 2019, y la mensual fue de 31.8 por ciento en comparación con junio del año pasado.

El personal ocupado total en el semestre es 15.8 por ciento menor que en los primeros seis meses de 2019, en tanto que en las horas trabajadas el retroceso fue de 18.3 por ciento.

Por valor de la construcción, la de Nuevo León fue en junio, por mucho, la de más peso en el país, con 12.3 por ciento del total nacional, impulsada sobre todo por el rubro de la edificación, cuyo peso fue de 18.4 por ciento y la electricidad y las telecomunicaciones con 10.9 por ciento.

Con información de Aristegui Noticias