Redacción PH

Miguel Morales Zenteno, presidente municipal de Tlachichuca, acusó a su antecesor Uruviel González Vieyra, hoy diputado local, de haber dejado un daño patrimonial de 68 millones de pesos en aquel municipio.

Aseguró en una rueda de prensa este miércoles, en la cual afirmó que el diputado con licencia enfrenta ocho denuncias penales en su contra, señalado por el desvío de recursos a través del pago de “obras fantasma” que fueron cobradas pero no entregadas.

De acuerdo con el presidente, el diputado se ha negado a entregar información de las cuentas públicas de su administración, además que las obras eran hechas por la constructora de su familia y cobradas por su subdirector de obras.

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Incluso, tras dejar su cargo, aseguró que el diputado siguió usando la clave fiscal del ayuntamiento para seguir expidiendo facturas a favor de sus hermanos Ramiro y Geovanni.

Tras descubrir su forma de operar y reunir pruebas, optaron por denunciar al diputado ante la Fiscalía General de la República (FGR), dependencia que integró las ocho denuncias en una sola carpeta de investigación.

Sin embargo ese no es el único señalamiento contra los hermanos González Vieyra, de acuerdo con Morales Zenteno, Ramiro González, expresidente municipal en Tlachichuca de 2008-2011, se encuentra procesado por actos de corrupción e incluso enfrenta una orden de aprehensión en su contra, misma que no ha podido ser cumplida por la intervención de Uruviel González.

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Aunque el caso ya es investigado el munícipe hizo un llamado al presidente Andrés Manuel López Obrador, y al gobernador, Miguel Barbosa Huerta, para que intervengan y se sancione al diputado, quien además, al igual que sus hermanos, buscan participar en este proceso electoral como candidatos a las alcaldías de Ciudad Serdán, Tlachichuca y San Nicolás Buenos Aires.