Por tercer mes consecutivo y en cumplimiento a la política de “cero tolerancia”, agentes de la patrulla fronteriza detuvieron a 51 mil 912 personas por cruces ilegales, lo que representa un incremento del 160 por ciento en comparación con mayo de 2017.

Al igual que sus antecesores, Donald Trump, presidente de los Estados Unidos intenta utilizar las cifras de arrestos como indicador de la necesidad de un “esfuerzo sostenido y un compromiso continúo de muchos meses para desmantelar a los cárteles y contrabandistas”.

Sin embargo, tal y como lo advirtió el diario The Washington Post dichas tácticas no han logrado disuadir a los migrantes.

En tanto, las autoridades migratorias advierten que se está enjuiciando al 100 por ciento de los cruces fronterizos ilegales, “estamos construyendo el primer muro nuevo en una década y hemos desplegado a la Guardia Nacional”.

Destaca que el cruce de familias indocumentadas incrementó en un 435 por ciento, en comparación con 2017, al igual que el número de menores no acompañados que se elevó en un 329 por ciento.

Mientras, son los menores inmigrantes quienes más han sufrido con las medidas y es que a la fecha no se ha podido precisar cuántos niños -desde octubre del año pasado- han sido separados de su padres.

De igual forma se prevé que el número de menores de edad aumente luego de que el secretario de Justicia, Jeff Session anunció que imputaría cargos criminales contra las personas que crucen la frontera de forma ilegal, así no tengan delitos previos.

Dicha situación deja en el desamparados a cientos de niños pues sus padres podrían ser encarcelados.