En México, el uso de los fideicomisos sigue permitiendo el uso opaco y discrecional de recursos públicos, los cuales en la actualidad manejan un equivalente al 15.8 por ciento del total de presupuesto de 2018.

De acuerdo con el estudio “Fideicomisos en México. El arte de desaparecer dinero público”, elaborado por el Centro de Análisis e Investigación Fundar, en el país actualmente existen 374 fideicomisos a nivel federal, los cuales manejan 835 mil 477 millones de pesos.

De esos 374 fideicomisos, 19 son considerados entidades paraestatales, es decir, que cuentan con estructuras internas de vigilancia y control, como sucede en las dependencias de la administración pública, hay un fideicomiso en el Poder Legislativo, 12 en el Poder Judicial, cinco en organismos autónomos.

El resto 337 se consideran entidades no paraestatales, es decir, como simples contratos financieros.

Son los fidecomisos los que generan el mayor daño al carecer de una estructura administrativa, ya que no cuentan con suficientes mecanismos de control interno, lo que implica amplios riesgos de opacidad.

Para dichos contratos se destina el 92 por ciento de los recursos, es decir 772 mil 63 millones de pesos, cifra que representa 20 veces más lo destinado a la reconstrucción de la Ciudad de México tras el sismo del 19 de septiembre de 2017.

“A pesar de los visibles riesgos de opacidad y de desvío de recursos que pueden representar estas figuras, las aportaciones -o transferencias- que el gobierno federal realiza a fideicomisos aumentan año con año, sin que se justifiquen estas asignaciones”, advierte el documento.

La situación resulta alarmante pues de 2013 a 2016 las transferencias se incrementaron en 62 por ciento, en particular a otros fideicomisos públicos y a fideicomisos constituidos por privados y las entidades federativas.

Mientras, al menos 139 de los fideicomisos con recursos públicos están constituidos en instituciones financieras privadas, por lo que más de 69 mil millones de pesos son imposibles de fiscalizar, ya que su información está protegida por el secreto fiduciario y el principio de confidencialidad.

Puebla, en el top

A pesar de los esfuerzos por transparentar, en marzo de 2018, el número de fideicomisos y fondos creados en las entidades federativas e integrados al padrón de sujetos obligados del Sistema de Portales de Obligaciones de Transparencia (Sipot) es de al menos 300, destaca Puebla en el tercer lugar con 32 de ellos.

Con igual número de fideicomisos que tiene la entidad poblana se encuentra el estado de Chiapas, en tanto, en primer y segundo lugar estuvieron Jalisco y Nuevo León, con 48 y 34, respectivamente.

En tanto, hay siete entidades federativas las que aún no han incorporado ningún fideicomiso: Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Hidalgo, Nayarit, Sinaloa y Tabasco.