Keiko Fujimori, líder del partido opositor Fuerza Popular de Perú, fue detenida en el marco de una investigación por presunto lavado de activos junto a su esposo, el estadounidense Mark Vito, quien no fue arrestado.

Fujimori fue arrestada tras ingresar a la fiscalía para declarar sobre el caso que incluye también presuntos aportes ilegales de la constructora brasileña Odebrecht a su partido político, dijo la abogada Giuliana Loza.

La detención ocurrió a pedido de la Fiscalía de Lavado de Activos al final de la audiencia ante el juez Richard Concepción Carhuancho ante el “grave peligro de fuga de parte de Keiko Sofía Fujimori Higuchi”, quien ha constituido una organización criminal en el interior del partido político Fuerza 2011, hoy Fuerza Popular.

Fujimori, hija del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), estará en prisión preventiva por un periodo de 10 días.

“No existe elemento de convicción y prueba alguna en su contra y no entendemos cómo un requerimiento abusivo, arbitrario pueda haber generado que se recorte la libertad a Keiko Fujimori”.

Keiko y Vito son investigados por lavado de activos por los aportes económicos recibidos a sus campañas electorales de 2011 y 2016, que incluyen ingresos por supuestos cócteles y financiación irregular por parte de Odebrecht.

Tanto Marcelo Odebrecht como su exrepresentante en Perú Jorge Barata han señalado a fiscales peruanos que la constructora dio aportes económicos a la campaña de Keiko, quien negó reiteradamente haber recibido ese dinero.

De igual forma, la semana pasada se anuló un indulto concedido al exmandatario Fujimori a fines del 2017 y ordenó su captura para que cumpla una condena de 25 años de prisión por violación a los derechos humanos.

El expresidente Fujimori se encuentra en una clínica local, donde fue internado poco después de la anulación de su indulto debido a una afección cardiaca, según sus médicos.