Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, anunció la construcción de una planta desalinizadora en Los Cabos, Baja California Sur, con una inversión de mil millones de pesos.

Sin ahondar en el proyecto de la desalinizadora, también anunció obras de infraestructura urbana y mejoramiento de viviendas para rescatar a las colonias marginadas por 600 millones de pesos.

De gira por la entidad y acompañado del gobernador Carlos Mendoza Davis, el Ejecutivo federal afirmó que el proyecto de la mina Los Cardones en la misma entidad, localizada entre La Paz y Los Cabos, que afectaría la Reserva la Biosfera Sierra La Laguna, se canceló.

Contrario a lo que ocurrió con la termoeléctrica en Morelos o con el aeropuerto en Texcoco, Estado de México, justificó que en este caso no habrá consulta porque es un asunto le compete directamente a él como presidente, además de que se debe proteger la riqueza y belleza natural, el equilibrio ecológico de la región y los atractivos de la zona para seguir captando al turismo internacional y nacional, ya que esa es la industria más importante para el estado.

Varias de sus acciones forman parte del Programa de Mejoramiento Urbano Mi México Late, que busca rescatar las colonias y zonas urbanas de 15 ciudades turísticas, en especial destinos como Los Cabos, Acapulco, Vallarta, y Bahía de Banderas.

De acuerdo con el tabasqueño la prioridad es que ya no existan contrastes ofensivos con zonas paradisíacas con hoteles de gran turismo, lujos y accesos a playas de ensueño, limpias y con todos los servicios, y por otro lado colonias marginadas, sin servicios básicos, inseguridad y carencias, donde habitan los empleados de hoteles, restaurantes y servicios como transportes y taxis.

Por ello, tan solo para Los Cabos este año se invertirán en drenaje, pavimentación, equipamiento urbano, parques y mejora a las viviendas, 600 millones de pesos.