Redacción
Raciel López Salazar, secretario de Seguridad Pública en Puebla, aseguró que el estado ha reportado una baja muy importante en incidencia delictiva, al lograr reducciones en el estado en 13 de 16 delitos considerados de alto impacto.
Durante la conferencia de prensa matutina del gobernador Miguel Barbosa Huerta, el funcionario dio a conocer las cifras más recientes presentadas por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En ese sentido el funcionario presumió una baja sustancial de enero a mayo en la comisión de delitos, en comparación con el mismo periodo de 2019.
En ese tenor advirtió una disminución del 30.32 por ciento en robos; 13.65 por ciento en robo de vehículos; 25.36 en el robo a casa habitación; 33.12 en robo a negocio; 28.92 por ciento en robo a transeúnte; 54.15 por ciento en robo a transporte y 66.79 en robo a transportista.
El robo de autopartes se redujo en 60.15 por ciento; lesiones dolosas bajó en 28.66 por ciento; en el caso de homicidios dolosos se redujo en 19.65 por ciento; los secuestros bajaron un 88.10 por ciento; en el caso de la extorsión la reducción es del 1.49 por ciento; violación se bajó en 23.37 por ciento.
Sin embargo, todas estas cifras se enmarcan en el inicio de la contingencia sanitaria ocasionada por el COVID-19 que inició a mediados de marzo y que hasta este lunes mantuvo a los poblanos confinados en sus hogares.
Por ello, si se considera el contexto nacional y la temporada de cuarentena, el estado se mantiene en los primeros lugares en cuanto a feminicidios, robo de autos, “robo total”, donde engloban robos a casa, vehículo, transeúntes, transporte, negocio, bancos, de maquinaria y otros, así como de homicidios dolosos y secuestros.
Por el otro lado, los delitos que han aumentado en estos cinco meses son: narcomenudeo en 113.77 por ciento; violencia familiar en 7.22 por ciento y feminicidios en 12 por ciento.
Sobre el aumento del narcomenudeo el funcionario señaló que el incremento es por el número de detenciones de bandas, por lo que los datos no se refieren al aumento de casos, sino al número de detenidos y carpetas abiertas por ese delito, lo que en consecuencia representa un avance en el combate al delito.
