Los turistas que visiten Indonesia no serán sometidos a la apodada “prohibición del sexo de Bali”, la nueva legislación que amenaza con hasta un año de cárcel a las parejas no casadas que tienen relaciones sexuales o seis meses para las que cohabitan.

El gobernador de Bali, un destino vacacional muy popular en el país, dijo que las autoridades no verificarían el estado civil de los turistas.

La ley entrará en vigor en tres años, pero podría enfrentar desafíos legales.

La nueva legislación es parte de una serie de cambios al código penal, que se producen después de un aumento del conservadurismo religioso en el país de mayoría musulmana.

El pasado 6 de diciembre, el Parlamento de Indonesia aprobó una amplia reforma del código penal que incluye la prohibición del sexo extramarital, los insultos al presidente y la apostasía – la negación o la renuncia de la fe en una religión –.

Para saber: Indonesia prohibe el sexo extramarital

Los cambios han sido denunciados como “antidemocráticos” por decenas de ONG y grupos civiles.

Aunque la prohibición de las relaciones sexuales extramatrimoniales ha captado la mayor parte de la atención en el extranjero, a muchos dentro de Indonesia les preocupa que otras partes del nuevo código sean más dañinas

A las empresas les preocupa que los cambios afecten a la industria turística de Indonesia al convertir al país en un destino menos atractivo mientras aún intenta recuperarse de la devastadora pandemia de Covid.

En 2019, más de 16 millones de personas visitaron Indonesia.

Si bien la ley técnicamente se aplicaría a locales y extranjeros, los funcionarios han tratado de minimizar los temores de que los turistas sean procesados.

“Bali es Bali como de costumbre, que es cómodo y seguro para visitar“, dijo el gobernador de Bali, Wayan Koster.

La reforma ha generado protestas desde que se hizo amago de aprobarla en 2019, cuando se paralizó tras masivas manifestaciones en el país, mientras decenas de personas se manifiestan en su contra desde ayer frente al Parlamento en Yakarta.