La práctica de los cobros a funcionarios a cambio de asignaciones de recursos, mejor conocida como “moche”, ya tocaron a la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), donde ya se investiga a un exjefe que recibió de manera ilicia más de 220 millones de pesos.

De acuerdo con Reforma, un hermano de Francisco Gerardo Martínez Pastelín, exjefe de ayudantes del titular de la Semar, Marina Francisco Saynez, habría manejado más de 220 millones de pesos en sus cuentas bancarias por depósitos de contratistas de la dependencia.

Otras de las pruebas presentadas en el juicio el hermano y los dos proveedores sumaron en sus cuentas depósitos de casi mil 400 millones de pesos entre enero de 2010 y abril de 2015, y solamente declararon ante Hacienda 48 millones de pesos.

Martínez Pastelín también fue indagado por la Secretaría de la Función Pública (SFP) por enriquecimiento ilícito, debido a la adquisición de inmuebles de alto valor y un automóvil Ferrari.

Abel Barajas señala en su nota que el contralmirante Francisco Gerardo Martínez Pastelín dijo que tenía un hermano empresario que le pagaba las cuentas y propiedades, así como que las inconsistencias en sus declaraciones patrimoniales fueron errores de registro que no eran de mala fe.

De quien habla es de Jesús Marcial Martínez Pastelín, a quien la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) detectó que le depositaron en el banco más de 222 millones de pesos durante los dos últimos años del sexenio pasado y los dos primeros del actual.

Aunque el hallazgo más importante que hizo la UIF, fueron hechos por Marco Antonio Martínez Tirado y Humberto Cervantes Pacheco, importantes proveedores de la Secretaría de Marina, que lo mismo le venden calzado que radares.

UIF sostuvo que la mayoría de los contratos y sus montos no se transparentan bajo el argumento de que se trata de información que puede poner en riesgo la seguridad nacional.