El pleito que comenzó en 2012 entre los entonces contendientes al Senado, Javier Lozano Alarcón y Manuel Bartlett Díaz, podría llegar a su fin siempre y cuando el expanista pague la “jugosa” multa de 321 pesos, tras perder una demanda por difamación.

Tras el sorprendente fallo, el excoordinador de campaña de José Antonio Meade Kuribreña, aseguró que sí pagará la multa impuesta por la Tercera Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Puebla, y que lo hará con uno de “500” para que con el cambio el abogado del próximo director de CFE “se coma unas cemitas, se tome un agua de jamaica y se le pase el coraje”.

Y es que en los últimos seis años el pleito entre los poblanos ha sido un constante ir y venir en tribunales, por lo que ahora Bartlett y sus abogados pretenden que se cubran los gastos “reales” de esa defensa (o sea, los honorarios que perciben estos), los cuales ya ascienden a 10 millones de pesos y no sólo los 321 que determinó el Tribunal poblano.

Los 321 pesos salen de las fojas utilizadas durante el caso, que se cotizan a 35 centavos cada una (o sea, para este caso se utilizaron 971), y no se establecen los costos que tuvo para Bartlett que sus abogados estuvieran activos durante seis años que duró todo este proceso.

Por lo anterior el proceso podría durar otro rato.

La historia

El pleito entre los expriistas inició en las elecciones de 2012 cuando ambos competían para ser senadores, Lozano Alarcón iba por el PAN y Bartlett Díaz representaba al PT.

Para “inyectarle” más emoción a las campañas, Bartlett acusó al neopanista de asociarse con José Córdoba Montoya, quien fuera secretario particular del expresidente Carlos Salinas de Gortari, para vender energía eléctrica al ayuntamiento de Puebla.

Al enterarse, Lozano lo consideró calumnia y lo demandó por daño moral.

Un año más tarde y ambos ungidos como senadores, se resolvió un fallo en favor del panista, con el que el ahora morenista quedó obligado a pagar 63 mil pesos.

Sin embargo el exgobernador de Puebla promovió un amparo impugnando esta decisión y pasando el caso al TSJ de Puebla.

En 2014, la Tercera Sala de ese mismo tribunal, resolvió que la demanda no era procedente y desestimó los cargos de daño moral, por lo que Javier Lozano promovió otro amparo para pasar el caso a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Sin embargo, el caso fue rechazado por los ministros.

Fue hasta hace poco con un Lozano de regreso en el PRI y un Bartlett listo para dirigir la CFE, cuando el TSJ de Puebla falló a favor del exsenador del PT y resolvió que Lozano tiene que cubrir los gastos de defensoría que fueron registrados por 321 pesos.