León Krauze y Gibrán Ramírez se enfrentaron a tuitazos por el tema de la presunta lista filtrada con nombres y montos de periodistas beneficiados en la administración de Enrique Peña Nieto con millonarios contratos.

Y es que, casi en automático la gran mayoría de los 39 mencionados fue tildado de “chayoteros”, por lo que varios de los implicados salieron a defender su nombre desde cuentas personales o a través de las cuentas de sus medios.

Uno de ellos fue Enrique Krauze quien, de acuerdo con la lista fue el tercer periodista “mejor pagado” al recibir 144 millones 80 mil pesos durante la pasada administración.

Por ello desde la cuenta de Letras Libres se emitió un mensaje en el cual compartían un listado de los artículos en los que se criticó al gobierno del priista.

Ese mensaje fue retuiteado por León Krauze, hijo de Enrique, con la frase “así de claro”.

Ese tuit le bastó a Gibrán Ramírez, novel politólogo y defensor de la Cuarta Transformación para lanzarse contra Krauze, a quien le respondió que tenía “144 millones de razones para ser críticos subsidiados”, clara referencia a la información publicada horas antes.

 

Incluso Ramírez agregó que Enrique fue parte del “armazón ideológico del viejo régimen”, por lo que Krauze le respondió y mandó al joven a leer, recomendándole un libro y precisando que su padre lleva “40 años de lucha por la democracia” los que “no se borran con esputos, de los que, como usted, sí que se alinean, y con gozo, al poder”.

Ramírez contraatacó y acusó a Krauze de no saber “lo que es un régimen político”, le recalcó que su padre fue el “historiador oficial y crítico subsidiado”.

Por ello León le pidió a Gibrán tener “pudor intelectual” y le dijo que las obras son la “diferencia central entre el intelectual liberal” y quienes abogan por la concentración del poder.

Gibrán contestó a León, diciendo que cuando su papá, Enrique Krauze, tenía la edad de él, aún faltaban 4 años para que empezara a escribir esa obra, mientras que él, publicará su primer libro este año o a inicios del siguiente.

León Krauze le dijo a Gibrán que su “pavoneo” lo hizo reír.

Lo que parecía el fin del intercambio de mensajes no terminó ahí, Gibrán contestó a León diciéndole que comenzó comparándolo con su “gran y luchador padre”, que le habla de su obra y aun así asegura que él es el que se está pavoneando.

“Que te haga bien la fortuna familiar a cargo del erario”.

Fue Krauze quien, emitió el mensaje final “no hay comparación alguna posible entre usted y mi padre”, con el cual concluyó la discusión.