Redacción PH

La invasión a Ucrania, es consecuencia de una serie de situaciones que diplomáticamente no pudieron solucionarse y se arrastran desde inicios de la década de 1990. Así lo vislumbra Jesús López Almejo, profesor de Relaciones Internacionales e investigador del Conacyt, nivel 1 del Sistema Nacional de Investigadores.

De acuerdo con el especialista, estos hechos están siendo ignorados pero justifican las acciones de Vladimir Putin que culminaron con la “operación militar especial” que inició la madrugada del 24 de febrero de 2022.

1- Desde 2014, en Donbass, fuerzas ucranianas de tintes neonazis, de origen golpista, asesinan a diario a población de ascendencia rusa. Estos ataques han sido sistemáticos y continuos, sin embargo “el mundo occidental, la ONU y los medios tradicionales callan”.

Este conflicto intentó resolverse diplomáticamente en varias ocasiones, incluso en las negociaciones para frenar la violencia en Donbass participó Joe Biden, actual presidente de los Estados Unidos, entonces vicepresidente con la administración de Barack Obama, y mientras Biden apoyaba a las autoridades ucranianas, Putin aprobaba enmiendas para facilitar a los rusohablantes de la zona en conflicto la obtención de la ciudadanía rusa.

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No obstante, días después de la firma de los acuerdo de Ginebra estos se incumplieron y hubo nuevos enfrentamientos, presuntamente propiciados por las fuerzas ucranianas, y por lo que Putín calificó al gobierno de Kiev de “dictadura militar” ya que usaron al Ejército contra sus propios ciudadanos.

Sin embargo, lo que ocurre a Donbass se ha reducido al conflicto armado entre las fuerzas independentistas de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL) y el gobierno de Ucrania.

2- Por estos hechos Rusia desde 2014 ha exigido garantías jurídicas, sin embargo no ha recibido respuesta, pese a que desde entonces se han firmado una serie de acuerdos, uno de los más importantes el Acuerdo de Minsk de 2015, con el que se buscaba poner fin al conflicto entre separatistas prorrusos y combatientes ucranianos.

Este acuerdo contenía 12 puntos para solucionar el conflicto y las negociaciones fueron supervisadas por los líderes de Francia y Alemania.

3- Rusia pide que Ucrania se comprometa con el respeto a los acuerdos de Minsk 1 y 2, y que deje de agredir a los rusos de Donbass; Ucrania lo ignora y Francia y Alemania guardan silencio.

Y es que, entre los acuerdos incumplidos estuvo el alto al fuego, la retirada de las armas pesadas del frente de combate, la liberación de los prisioneros de guerra y la reforma constitucional en Ucrania.

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Las últimas conversaciones entre los líderes de Ucrania, Rusia, Francia y Alemania sobre el acuerdo de Minsk fueron en 2019, sin resultados positivos.

No obstante, el 22 de febrero del año en curso se señaló al presidente de Rusia de romper los acuerdos al firmar un acta reconociendo la independencia de Donetsk y Luhansk.

4- Durante los últimos años, la OTAN, Estados Unidos y la Unión Europea han financiado “impunemente a Ucrania, y la ONU callada”.

Previo a la invasión rusa, en diferentes ocasiones Vladimir Putin denunció que potencias como Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá, Francia y países miembros de la OTAN estaban enviando armas y dinero para financiar a las fuerzas ucranianias, sin embargo las naciones negaron tales acusaciones, hasta ahora bajo pretexto de la invasión.

Tan solo en las últimas horas Joe Biden ordenó al Departamento de Estado liberar hasta 350 millones de dólares para “apoyo inmediato a la seguridad y defensa de Ucrania”, cifra que se suma a los 60 millones y 250 millones que envió durante el último año a esta nación.

No obstante, desde 2019 Estados Unidos ha enviado misiles Javelin, armas antitanque de las más modernas y que pueden acabar con vehículos blindados o búnkeres.

Sin embargo no son los únicos, Polonia ha suministrado al Kiev un arma similar guiada por calor, el GROM, que puede atacar aviones desde una distancia de hasta tres kilómetros, mientras Lituania entregará misiles Stinger estadounidenses y Turquía drones Bayraktar TB2, que no solo sirve para reconocimiento áereo, también puede equiparse con bombas o cohetes guiados por láser.

Mientras que naciones como Polonia y República Checa están enviando municiones, cascos, chalecos protectores o piezas de artillería.

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En tanto, Oleksiy Reznikov, ministro ucraniano de Defensa, en redes en los últimos días ha presumido los aviones, municiones y armas que han enviado sus aliados occidentales y -de acuerdo con el funcionario- ya suman mil 500 millones de dólares en ayuda militar.

5) Tan solo Estados Unidos ha enviado más de 300 toneladas de armas largas a Ucrania y “miles de millones de dólares a las fuerzas armadas ucranianas”, pese a ello amenaza constantemente a Rusia con sanciones.

6) Rusia pide que la OTAN no se extienda hacia sus fronteras, y que no adhieran a Ucrania ni a Georgia, sin embargo la respuesta de Europa fue que están en todo su derecho “de hacer lo que les venga en gana”, a la par tampoco respondieron a las garantías jurídicas que Rusia acordó con Estados Unidos a inicios de la década de los 90.

7) Finalmente, en 2020 y 2021, se aprobó en la ONU una resolución que condena el Nazismo, el neonazismo y el fascismo en todas sus formas, pero Estados Unidos y Ucrania votaron en contra mientras casi toda Europa se abstuvo y la ONU guardó silencio.

En suma “cerraron todas las opciones diplomáticas a Rusia, ignoraron todas sus peticiones jurídicas y se olvidaron de los civiles rusoparlantes del Donbass. Ahora que Putin toma las riendas del asunto con hechos consumados, se escandalizan”, concluyó el investigador.