En Rusia, por lo menos 26 personas habrían muerto por intoxicación por alcohol esta semana después de consumir licores caseros en la región de Orenburg, fronteriza con Kazajistán.
De acuerdo con las autoridades rusas, otras 28 personas sufren síntomas de intoxicación por alcohol.
La rama regional del Comité de Investigación de Rusia abrió un caso para determinar si los productos alcohólicos vendidos en la región, a unos mil 500 kilómetros al sureste de Moscú, cumplen con los estándares de seguridad.
El viernes, el comité dijo que seis personas habían sido detenidas, acusadas de producir y vender alcohol no apto para el consumo.
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Después de un caso de intoxicación masiva por alcohol en Siberia en 2016, las autoridades nacionales ordenaron controles más estrictos sobre la producción y venta de bebidas, medicamentos, perfumes y otros líquidos que contienen un alto porcentaje de etanol.
