Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, durante su visita a Puebla, dejó en claro que no permitirá el uso de su nombre o imagen para el proceso electoral extraordinario que comenzará a finales de marzo.
Desde el Centro Expositor donde presentó los programas de la Secretaría del Bienestar, López Obrador sin mencionar nombres criticó a los aspirantes a la candidatura de Morena que “no han entendido nuestro movimiento. Nosotros no estamos por posiciones, nuestra finalidad es la gente”.
También tildó de políticos “fantoches” a los que usan las fotos que se han tomado con él para presumir apoyo e incluso argumentan que merecen una candidatura por los años que han tenido dentro del partido.
“Ya no queremos al político corrupto, fantoche, ambicioso, nada de que es mi amigo, porque cuando quieren llegar los que no tienen convicciones, ahí andan de barberos simulando que les importa mucho el pueblo”.
Advirtió que no se permitirá la alteración de los resultados o el fraude electoral, como –aseguró—ocurrió en el pasado proceso electoral dónde se llegó al extremo de manipular los procesos para lograr un resultado electoral. Ante ello, llamó a los poblanos a hacer de este proceso uno distinto, que respete la verdadera voluntad del pueblo.
“Ahora estamos en vísperas de estas elecciones que se dan en el marco de la cuarta transformación de la vida pública de México, ya no permitamos todas esas actitudes antidemocráticas, nada de compra de voto, nada de tráfico con la pobreza de la gente, nada de acarrear a la gente a votar, nada de falsificar los resultados electorales, nada de fraude electoral, que se haga ese compromiso, que las elecciones sean limpias”.
Recordó que para evitar impunidad por dichas acciones la ley se reformó y los delitos electorales ya son considerados graves, por lo que ameritan prisión preventiva sin derecho a fianza.
También dijo que con la Cuarta Transformación quedan atrás prácticas como el desvío de recursos públicos para las elecciones, pues además de ser contrario a lo que promueven, es un gobierno sin partido que respetará la voluntad de los ciudadanos.
“El gobierno no tiene partidos mucho menos se va a permitir que se use dinero del pueblo para favorecer a un partido o a un candidato”.
Finalmente anunció que no regresará a Puebla hasta que hayan transcurrido los comicios del próximo dos de junio, para evitar malas interpretaciones.
