Desde Puebla la expresidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo Morales, anunció que buscará la presidencia del sindicato luego de que fuera defenestrada, encarcela y hace unos meses exonerada de todos los cargos.

“Sed de venganza no la tengo, palabra de honor que no, lo que debemos tener es sed de justicia y de legalidad. Yo sentí mi derecho, legal y legítimo, al ser exonerada de llegar a la presidencia del sindicato cuando haya una elección libre, con voto secreto y directo y universal”.

Durante su visita, al participar en el segundo Encuentro Nacional de Jóvenes de Maestros por México, en San Pedro Cholula, la maestra se lanzó contra el grupo que ahora está en la cúpula magisterial, al advertir que “no sirven para nada; son mediocres y pequeños”.

Incluso adelantó que como liderazgo, no entrarán en controversia con el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, siempre y cuando mantenga el respeto a la autonomía sindical.

“No queremos ningún pleito con ningún gobierno, cuarta, quinta o décima transformación, mi respeto al señor presidente pero zapatero a tus zapatos, respeto a la autonomía sindical”.

En el mismo espacio también celebró que a “Redes Sociales Progresistas” se le entregara su registro como partido.

También dejó en claro que está apostando a ganar la dirigencia.

“Tenemos lo más importante: la decisión de dar la pelea y la vamos a ganar por una razón elemental: porque no hay de otra”.

“Reformita”

Durante los más de 45 minutos que tomó el micrófono para emtir su mensaje, aprovechó para emitir otras criticas, por ejemplo al tildar de “reformita” la propuesta que impulsa el tabasqueño y criticó la desaparición del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) e incluso dijo que el SNTE debe opinar sobre la materia de trabajo.

Lo anterior porque la nueva reforma educativa que busca el gobierno federal le quita al sindicato el poder de participar en los mecanismos para la entrega de plazas.

“Reclaman que la CNTE está en una posición intransigente, quizás sean los únicos que están haciendo algo, porque los demás están esperando que lo haga el buen gobierno y la cuarta transformación y ni siquiera, ¿eh? porque la cuarta transformación no es la reforma que esperábamos”.

Este es, hasta ahora, el mensaje más largo que emite la lideresa tras su exoneración, cuando aseveró que su regreso derrumbó la reforma educativa.