Omar Iván Camacho, locutor de radio local y periodista deportivo de Sinaloa fue asesinado, convirtiéndose en el séptimo comunicador ultimado en lo que va del sexenio de Andrés Manuel López Obrador.

Por ello a punto de cumplirse cuatro meses de su toma de protesta, el tabasqueño durante su conferencia de prensa matutina anunció cambios en el sistema de protección para periodistas y defensores.

Omar Iván fue encontrado asesinado en el municipio de Salvador Alvarado, Sinaloa, horas antes fue parte de la transmisión radial una partido de beisbol. Al salir del estadio desapareció. A las pocas horas su familia empezó a buscarlo.

Después de las 19:00, llegó un reporte a las corporaciones policiales: en la autopista Benito Juárez, abajo del puente de La Escalera, se había encontrado un cuerpo sin vida. Era Omar Iván Camacho. Su cadáver presentaba signos evidentes de tortura.

Las fallas

Tras destacar que siguen lidiando con las consecuencias del sexenio de Enrique Peña Nieto, Encinas destacó que durante los últimos años la gestión del priista disminuyó el presupuesto al sistema de protección para periodistas y defensores.

Inlcuso acusó a la empresa de que opera las medidas de cuidado para los periodistas que se acogen al programa. Se trata de RCU Sistemas, representada por Israel González León

“Los dispositivos tecnológicos que entregan -botones anti-pánico- fallan o no tienen señal de geolocalización. Pero tampoco cuentan con permisos para que su personal porte armas, así que terminan contratando a marinos o soldados retirados para que puedan portar sus armas de retiro”.

Lo que se busca es volver a tomar el control de la operación, pero que no se hará hasta que se cuenten con todos los elementos para garantizar la protección de los afectados, mientras la Auditoría Superior realizará una investigación sobre fideicomiso que maneja los fondos de este mecanismo.

“Esta empresa tenía sobre-gastos, pero cuando nos hagamos cargo desde el Estado, tendremos un ahorro de hasta 15%”,

Incluso AMLO admitió brevemente que el asesinato de comunicadores proviene en gran parte desde los mismos órganos de Gobierno.

“Sin duda, hay dos grupos de agresores: los grupos delictivos y los representantes del estado”.

Su nueva estrategia también prevé involucrar a los dueños de los medios de comunicación para colaborar en garantizar las condiciones de seguridad de los periodistas y que los colaboradores se desempeñen en condiciones óptimas.

“Hemos encontrado casos vergonzosos. Por ejemplo, el caso de una mujer a la que, por sus notas, le pagaban con 50 ejemplares diarios del periódico para el que colaboraba para que ella los vendiera”.

Cabe recordar que Camacho es el segundo periodista asesinado en menos de 10 días. El pasado 16 de marzo Santiago Barroso fue asesinado durante un ataque directo al frente de su domicilio.

Actualmente hay 498 defensores de derechos humanos y 292 periodistas inscritos en dicho programa.