Redacción

En menos de dos meses, Grupo México perdió más de 300 millones de pesos en siete descarrilamientos, todos ellos fueron sabotajes provocados en la ruta Ciudad de México-Veracruz, identificada como la más peligrosa en los últimos dos años.

Del total, 130 millones de pesos fueron en ventas perdidas, 11 millones en sustracción de bienes de los trenes y 171 millones en reparación de vías, locomotoras y carros.

Sin embargo, el consorcio podrá mitigar el impacto de los ataques con la recuperación vía seguros, y a través de los más de mil 700 guardias privados y el área de monitoreo y prevención.

La empresa advierte que las vías más peligrosas son las que conectan la capital con importantes puertos en el Golfo de México y el océano Pacífico y las que cruzan los estados centrales Puebla, Guanajuato, Veracruz, Tlaxcala, Estado de México, Guerrero y Michoacán.

Una de las estrategias para combatir el problema ha sido acelerando la velocidad de los trenes, sin embargo a pesar de ello, entre enero y marzo, las pérdidas por robos y bloqueos para Grupo México Transportes sumaron al menos 15 millones de dólares.