Por contar con un sistema de procuración de justicia de los más lentos, poco confiables, con procedimientos opacos y poco efectivo, Puebla se ubica en el sexto lugar nacional del Índice Estatal de Desempeño de las Procuradurías y Fiscalías 2019.
El análisis de la organización Impunidad Cero coloca al estado solo por debajo de Tlaxcala, que ocupa el primer lugar con una calificación de 36.96, seguido de Veracruz (37.01), Chiapas (37.30), Guerrero (37.91), Tamaulipas (38.14) y Puebla con 39.14.
Es el número limitado de ministerios públicos locales por cada 100 mil habitantes, lo que coloca al estado en dicho escaño, al advertir un incremento en las cargas de trabajo, el tiempo de espera de los denunciantes, el porcentaje de efectividad de las resoluciones de investigación, el incumplimiento de las ordenes de aprehensión, lo que genera que la población no confié en las autoridades locales y en consecuencia, no denuncie y disminuya su efectividad.
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No obstante, al cierre de las administraciones panistas y en comparación con 2018, Puebla logró salir del fondo de la tabla y escalar cinco posiciones, dejando el lugar 32 del ranking.
El año pasado la Fiscalía General del Estado también se posicionó como la tercera peor fiscalía por sus niveles de impunidad, los cuales ofrecen sólo un 1.14 por ciento de probabilidades de esclarecer el delito
