Roberta Jacobson, embajadora estadounidense en México, se despidió este sábado de México, tras dos años en el cargo y aseguró que ambas naciones han avanzado en la relación bilateral de manera “muy profunda”.

“No digo adiós, sino hasta luego”, dijo la diplomática antes de abordar un vuelo comercial rumbo a Estados Unidos.

Jacobson anunció el pasado 1 de marzo su renuncia, en un momento de creciente tensión en la relación bilateral, particularmente en los temas migratorio y comercial, dado que México, Estados Unidos y Canadá se encuentran inmersos en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Tlcan).

Agregó que sale de México con “un dejo de tristeza y un profundo sentimiento de aprecio por este maravilloso país y su gente”, así como con la convicción de que durante estos años se ha “avanzado en la relación de manera muy profunda”.

En un comunicado, la embajada estadounidense en México recordó que, después de tres décadas de trabajo en el Departamento de Estado -la mayoría de ellos en asuntos relacionados con el continente americano-, Jacobson se retira del Servicio Exterior de los Estados Unidos.

En junio de 2015, Jacobson fue nominada por el presidente Barack Obama para ser embajadora en México -un puesto que hasta ese momento nunca había desempeñado una mujer- y el Senado confirmó su cargo en abril de 2016, tras lo cual arribó al país latinoamericano en el mes de mayo.

Cabe recordar que Donald Trump, el presidente estadounidense,  aún no ha nombrado un reemplazo para Jacobson, quien destacó por ser una respetada experta en temas del hemisferio occidental.

Por ahora su puesto será cubierto interinamente por su segundo al mando, William Duncan.