Redacción

La incidencia delictiva en las carreteras que cruzan el estado no baja, colocando al estado en el primer lugar en robo a transportistas, uno de los cuatro delitos que mayor alza han reportado en lo que va del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

Reconoció Luis Crescencio Sandoval González, titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), durante la conferencia matutina del mandatario federal, con base en datos de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana y del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

En ese tenor, el castrense informó que Puebla es el estado del país con la tasa más alta por cada 100 mil personas de robo a transportistas al reportar una incidencia de 44.30 cuando la media nacional es de 8.45.

Le siguen otro “ligeros” repuntes en secuestros, delito que ocupa el 15vo lugar nacional, con una media de 1.25 casos por cada 100 mil habitantes, mientras que el homicidio doloso ubica al estado en el 17vo nacional y el narcomenudeo lo coloca en el lugar 29.

A la par Sandoval consideró que el gobierno del estado ha hecho un esfuerzo para reducir el índice de secuestros, pues en marzo no hubo casos, pero en abril hubo dos y ello reflejó un aumento.

Respecto a los homicidios, hasta el mes de abril se han registrado en el estado 1 mil 513 lo que mantiene al estado por arriba de la media que es de 1 mil 301.

En contraste, el robo de vehículos y los asaltos en el transporte mantienen una tendencia a la baja, aunque mantienen a nivel nacional el quinto lugar en ambos rubros.

Mientras que los robos a casa habitación, las extorsiones y las violaciones han tenido un comportamiento a la baja, delitos que en conjunto colocan al estado en el lugar 20vo nacional.

También destacó que durante abril la entidad se colocó por debajo de la media nacional en delitos por cada 100 mil habitantes, al reportar una media de 68.6 cuando la nacional alcanza el 87.3.

Lo mismo ocurre en un comparativo de enero a abril, donde el estado ocupa el lugar 22 con una incidencia de 311.9 por ciento cuando la media nacional alcanzó el 480.2 por cada 100 mil habitantes.

Dichas cifras también fueron celebradas por el gobernador Miguel Barbosa Huerta, quien presumió la tendencia a la baja en la incidencia delictiva en lo que va de su administración.