Un funcionario de la PGR en tiempos de Jesús Murillo Karam participó en el consorcio que cobró a dicha dependencia 32 millones de dólares por la adquisición del malware espía Pegasus, informó Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).

Luis Fernando Ayala Puente, trabajador en la oficina encargada de custodiar los bienes decomisados a delincuentes de la PGR, fue socio fundador de la empresa Citelae, la cual registró el nombre y el logotipo de Balam Seguridad Privada ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).

Todo inició cuando en octubre de 2014, una empresa filial de Balam, denominada Grupo Tech Bull, obtuvo de la PGR un contrato por 32 millones de dólares (equivalente a 450 millones de pesos de entonces) para proveer el malware de espionaje Pegasus, el cual ha sido utilizado para infectar teléfonos inteligentes de defensores de los derechos humanos, políticos de oposición y periodistas.

Ayala Puente ayudó a crear Citelae del Centro, en cuya acta constitutiva fue registrado como socio con el 33 por ciento de las acciones y una aportación de 16 mil 500 pesos al capital social.

En octubre de 2013 se acordó liquidar Citelae, ese mismo mes en que fue extinguida, nació en la ciudad de México otra empresa de seguridad ligada a Balam, de nombre Grupo Tech Bull, también con un capital social de 50 mil pesos y con un contador público recién egresado como accionista y administrador único.

Esa empresa fue la que en octubre de 2014 –a un año de haber sido creada- obtuvo un contrato por 32 millones de dólares de la PGR para vender el malware espía Pegasus, desarrollado por la compañía israelí NSO.