Redacción

Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla, recordó que, aunque es prioridad atender el hacinamiento en las cárceles del estado construyendo nuevos penales, las fuentes de financiamiento se ha ido sesgando, por lo que ya no será posible la construcción de un reclusorio federal, ni tampoco la edificación de un inmueble para dividir la población del penal de San Miguel.

Reconoció durante su rueda de prensa matutina desde Casa Aguayo, donde mencionó que del plan inicial estipulaba construir cinco penales en el estad pero ahora sólo podrán llevarse a cabo la ejecución de dos que servirían para el traslado de los ceresos de Cholula y Tehuacán.

Mencionó que desde que inició su gobierno se planteó construir un penal federal, sin embargo, la federación no apoya este tipo de proyectos de igual forma que tampoco respaldó el proyecto para dividir el penal de San Miguel en dos.

Añadió que el problema es que fueron proyectos que se abandonaron durante mucho tiempo, sin embargo es necesario darles continuidad.

No obstante, dijo que insistirá en el apoyo federal para un reclusorio en Puebla, al tiempo que adelantó que sí Barbosa Huerta no descartó que se construya el de Tehuacán, ya que puede ser autofinanciable, y el de San Pedro Cholula puede ser fondeado por recursos del estado.

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Cabe recordar que el proyecto original del mandatario estimaba que tener listos en 2.5 años cuatro nuevos centros penitenciarios, uno de ellos en Puebla y cuatro regionales se ubicarían en Huauchinango, Izúcar de Matamoros, Teziutlán y Tehuacán, con la capacidad de albergar a mil personas cada uno.