La economía mexicana registró un crecimiento del 0.6% en el segundo trimestre de 2025 respecto al periodo enero-marzo, según cifras ajustadas por estacionalidad del Inegi.

Este dato es ligeramente inferior al 0.7% que se había estimado previamente. La revisión se debió principalmente a una caída más pronunciada en las actividades primarias y una leve corrección en las manufacturas, aunque los servicios mostraron una mejora.

Las actividades primarias, que incluye a la agricultura, ganadería y pesca, sufrió una contracción del 2.4%, mayor al 1.3% que se había calculado inicialmente.

Las actividades secundarias, que incluyen las manufacturas, crecieron 0.7%, una décima menos que la estimación anterior. Dentro de este grupo, el sector minero acumula seis trimestres consecutivos de caídas, mientras que la construcción retrocedió 1.7% entre abril y junio, sumando dos trimestres en negativo.

Por otro lado, las actividades terciarias, que abarcan los servicios, fueron revisadas al alza, pasando de un crecimiento del 0.7% a uno del 0.8%.

En términos anuales, el PIB aumentó 1.2% en el segundo trimestre, con un destacado crecimiento del 2.6% en las actividades primarias y del 1.8% en los servicios, pero en el caso de las actividades secundarias hubo una disminución del 0.3% en comparación con el mismo trimestre del año anterior.

Finalmente, en el acumulado del primer semestre de 2025, la economía mexicana creció un 0.9% respecto al mismo periodo de 2024. Este dato refleja una expansión moderada, influenciada por el desempeño mixto de los distintos sectores productivo.