Brooke Rollins, secretaria de Agricultura de Estados Unidos, expresó su preocupación por la falta de protocolos adecuados por parte de México para contener la propagación del gusano barrenador del ganado del Nuevo Mundo.

Rollins calificó de “inaceptable” la ausencia de controles en el movimiento de ganado y a la falta de colocación de trampas para moscas por la reciente detección de la plaga a menos de 113 kilómetros de la frontera estadounidense.

Además la funcionaria recalcó que amas medidas ya se había acordado, por lo que al no cumplirlas afectan la detección temprana.

Las declaraciones de Rollins, realizadas en el Ag Outlook Forum, intensifican la tensión entre ambos países, justo antes de una revisión del acuerdo comercial T-MEC.

Debe recordarse que Estados Unidos ha mantenido prácticamente cerrada su frontera a las importaciones de ganado mexicano desde mayo debido al brote.

Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, mencionó que su país no había sido notificado de ningún cambio en la expectativa de reapertura antes de noviembre y señaló que el control del movimiento de ganado dentro de México es complicado.

En tanto, Estados Unidos ya ha invertido 21 millones de dólares en una instalación en el sur de México para producir moscas estériles que ayudan a controlar la población silvestre del parásito.