Alejandro Armenta Mier, gobernador de Puebla e integrantes de su gabinete y el edil de Chignahuapan recorrieron la zona afectada por inundaciones en la comunidad de Aljolotla, donde la lluvia atípica del lunes 2 de junio por la noche dejó daños considerables.

En esta comunidad, la tromba del pasado lunes creó corrientes de agua que alcanzaron hasta un metro de altura y devastaron la población de casi 500 habitantes.

La avalancha de agua y lodo terminó sepultando cultivos, vehículos, las granjas de traspatio y a sus habitantes, además de un vivero, viviendas y la escuela de la comunidad.

La intensa lluvia continuó el martes complicando las labores de limpieza en la zona, por lo que se ordenó activar el Plan DN-III-E, con el fin de proteger a la población.

Finalmente, este miércoles Alejandro Armenta visitó las zonas afectadas, comprometiéndose a ayudar a las familias damnificadas.

Su recorrido por las zonas afectadas incluyó una visita al Auditorio Ejidal de Ajolotla donde se habilitó un albergue para los damnificados, espacio en el que pueden recibir, además de un techo temporal, alimentos, ropa, despensa, pañales y artículos de limpieza.

El mandatario también prometió a los afectados trabajar en coordinación con el gobierno municipal de Chignahuapan para garantizar los apoyos necesarios en cada una de las viviendas de Ajolotla que resultaron con afectaciones.

Indicó que 136 personas afectadas recibirán despensas, en tanto maquinaria de la Secretaría de Infraestructura aplicará un dragado del río para que tenga un mejor desahogo.

También se rehabilitará el puente que cruza entre la primaria y preescolar de la comunidad, dijo para luego celebrar que aunque es una tragedia, no hubo pérdidas de vidas humanas, en tanto lo material podrá reponerse.

En cuanto a los daños, Bernabé López Santos, titular de la Coordinación General de Protección Civil y Gestión del Riesgo de Desastres del estado, precisó que 35 casas se declararon pérdida total, además hay 35 más con daños menores y 110 requieren reforzamiento para evitar que sufran algún daño futuro.