La mañana del domingo 15 de junio, la presidenta municipal de San Mateo Piñas, Oaxaca, Lilia Gema García Soto, fue asesinada a balazos dentro del Palacio Municipal por un grupo de personas no identificadas.

De acuerdo con las autoridades, en el ataque también perdió la vida otra persona, identificada únicamente por las iniciales G. R. G.

El morenista Salomón Jara, gobernador del estado, condenó enérgicamente el crimen y aseguró que su gobierno no permitirá impunidad, además se comprometió a colaborar estrechamente con la Fiscalía General del Estado para esclarecer los hechos y brindar justicia a los familiares de las víctimas.

La Fiscalía inició investigaciones formales y, en coordinación con fuerzas federales como el Ejército y la Marina, desplegó un operativo de seguridad en la región, al mismo tiempo que se llevan a cabo las diligencias ministeriales y periciales para identificar a los responsables.

Este tipo de atentados ha encendido las alertas en un contexto nacional marcado por la violencia contra figuras políticas.

Según la organización civil Data Cívica, en los primeros cuatro meses del año se han registrado 246 ataques contra funcionarios o aspirantes a cargos públicos en México, con 136 asesinatos. Oaxaca se ubica como el cuarto estado con más incidentes, en una tendencia alarmante que acumula más de 2 mil 400 hechos violentos de este tipo desde 2018.