Agentes de la Policía Estatal designados al equipo de seguridad personal de Javier Corral Jurado, gobernador de Chihuahua, fueron atacados a tiros resultando tres heridos; de acuerdo a la información oficial, el gobernador nunca estuvo en peligro.

Los hechos sucedieron este sábado, cuando los agentes se encontraban en el estacionamiento de una tienda Oxxo, a la entrada del Club San Francisco de Chihuahua, donde presuntamente estaba el gobernador jugando golf.

Aunque al principio se rumoró que se trataba de un “atentado” como represalia del gobierno federal, luego de que Corral denunciara a través de un video que un tribunal de la Ciudad de México les arrebató el caso de Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, ex secretario general del PRI, Antonio Enrique Tarín García y Gerardo Villegas Madriles, todos acusados de varios delitos de corrupción.

“Los tres están bajo proceso penal por diversos delitos de corrupción en perjuicio del patrimonio del pueblo de Chihuahua, cometidos durante el sexenio de César Horacio Duarte Jáquez, hoy prófugo de la justicia (…) El Poder Judicial de la Federación, da así una demostración de sumisión al Presidente de la República”, acusó.

Horas después del hecho, a través de sus redes sociales y un comunicado oficial, Corral Jurado indicó que su vida nunca corrió peligro, pues no se encontraba en el lugar de los hechos, además confirmó que los tres agentes ya se encontraban fuera de peligro.

Finalmente, en el comunicado las autoridades adjudicaron el hecho delictivo a una represalia directa por el combate contra la delincuencia en la entidad.