Mark DeMarco, abogado de Caro Quintero, denunció que las medidas que tomó la prisión de Nueva York contra su cliente son abusos que vulneran su integridad física y emocional.

Denunció en una carta dirigida al juez Frederick Block, en la que también acusa que la fiscalía de Estados Unidos no ha expuesto ningún argumento válido para mantener “aislado del mundo” al capo, que también está incomunicado de su familia en México.

“El señor Quintero está esencialmente confinado a una pequeña celda sin ventanas. Permanece solo en esta celda durante 23 horas al día de lunes a viernes; los fines de semana, está confinado las 24 horas del día y no se le permite hacer ningún ejercicio”, dice parte de la misiva.

Los abusos comenzaron tras la presentación de Rafael Caro Quintero en la corte de Brooklyn, en Nueva York, cuando fue enviado al Centro Metropolitano de Detención, momento desde el que se perdió todo contacto con sus familiares en México, a quienes solo ha llamado por teléfono en dos ocasiones y de forma breve.

Las únicas visitas que recibe son de sus abogados, pero no de investigadores de su caso, según la denuncia del defensor.

También denunció que “sus comidas son entregadas por una rendija en la puerta, y come solo. La luz siempre está encendida. Con un aire acondicionado errático, muchas veces carece de ropa suficiente o sábanas para evitar el frío”.

“Los riesgos por un confinamiento solitario tan extremo, para su bienestar y por su cordura, son terribles”, acusó Mark De Marco y exige que al fundador del Cártel de Guadalajara tener menos restricciones durante su estancia en la prisión.

Lo anterior, basándose en que no se presentaron acusaciones relacionadas con terrorismo, además que el Departamento de Justicia de Estados Unidos ordenó a la Fiscalía no solicitar la pena de muerte contra Caro Quintero.