A 65 días de los comicios en Puebla y con la elección impugnada, en redes sociales se volvieron a enfrentar, Martha Erika Alonso Hidalgo, gobernadora electa de Puebla y Luis Miguel Barbosa Huerta, excandidato, ahora fue por una nueva campaña negra.

Fue este miércoles cuando en distintos puntos del centro de la ciudad comenzaron a repartir volantes con la fotografía de la esposa del exgobernador, Rafael Moreno Valle y una leyenda:

“Martha Erika Alonso, delincuente electoral. No será gobernadora. #NoalfraudeenPuebla”

En respuesta desde su cuenta Twitter, Alonso Hidalgo pidió a los partidos integrantes de la coalición “Por Puebla al Frente” denunciar penalmente los hechos.

Además aprovechó el mismo espacio para señalar directamente a Miguel Barbosa Huerta de ser quien orquestó el ataque en su contra, al tiempo que le invitó a actuar con “madurez” y aceptar los resultados.

Sin embargo el neomorenista no se quedó callado y le regresó el ataque.

Pues mientras la panista acusó al experredista de misógino y haberla ofendido durante la campaña electoral, Barbosa Huerta respondió que ella, junto con su esposo y ahora senador Moreno Valle, le robaron la elección.

Asimismo aseguró que ellos mantienen una guerra sucia en su contra, financiado con dinero público.

El morenista finalizó advirtiendo que sus ataques son porque “están muertos de miedo”, pues consideró un hecho que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Tepjf) será el que anule la elección.

Cabe recordar que durante el pasado proceso electoral, la expanista y ahora morenista Violenta Lagunes Viveros encabezó la campaña “AMLO Sí, Barbosa NO”, desde la cual promovió el voto diferenciado contra el oriundo de Tehuacán.

Además de eso, fueron incontables las publicaciones de medios locales y nacionales en dónde se cuestionó la fortuna del candidato, que incluyó la casa de un expresidente valuada en 20 millones de pesos.