La policía de Suiza decomisó en una fábrica de café más de 500 kilogramos de cocaína que estaba escondida en sacos de café provenientes de Brasil.

La cocaína se encontraba oculta en sacos de café de grano que serían comercializados en formato de cápsulas para su venta en supermercados, detalló la policía.

La cocaína fue encontrada por trabajadores de la fábrica que, al descargar los sacos se percataron que muchos estaban llenos de un “polvo blanco indefinido”. Por lo que dieron aviso inmediato a las autoridades.

Según el informe de la policía, tras realizar las pruebas correspondientes se confirmó que se trataba de cocaína. Cuyo valor del cargamento asciende a más de 50 millones de dólares, pues se trata de cocaína pura.

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Hasta ahora se sabe que el destino de este cargamento era abastecer de drogas para el mercado europeo.

El hallazgo ocurrió en una planta de café localizada en Romont, al oeste de Suiza. Y es la policía de Friburgo, la encargada de investigar el caso de tráfico ilegal.

La policía Suiza se vio obligada a instalar un perímetro de seguridad en la fábrica de café mientras procede la investigación. Se afirmó que este hecho será investigado para confirmar cómo opera el tráfico de drogas al norte de Europa.

Así mismo, la empresa de café aseguró a sus consumidores que, dicha sustancia no entró en contacto con ninguno de sus productos que, próximamente llegarán a tiendas.