Más de 48 horas después de que se confirmara el asesinato de Aldo Islas Todd, estudiante de Contaduría de la BUAP, quien fue secuestrado el pasado jueves por la tarde, la autoridad universitaria exigió que se aplique todo el peso de la ley a los responsables.

El estudiante de 19 años, originario de Teziutlán, fue localizado desde el pasado viernes en una habitación del motel Miño, lugar al cual desde el jueves habría ingresado junto con tres hombres y dos mujeres, todos ellos a bordo de un automóvil Chevrolet Aveo tipo taxi.

Fue hasta la mañana de este lunes cuando la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), a través de un comunicado en redes sociales, lamentó el fallecimiento del estudiante.

En la esquela publicada, la máxima casa de estudios del Estado, externó sus condolencias a los familiares del joven, situación que desató la molestia de la comunidad universitaria, quienes exigían además de un posicionamiento que se cambiara la redacción del escrito pues no “falleció”, fue asesinado.

Más tarde, desde su cuenta personal Alfonso Esparza Ortiz, rector de la BUAP en dos mensajes condenó el asesinato y exigió que se aplique “que se aplique todo el peso de la ley a los responsables”.

De acuerdo con los trascendidos, a la familia los captores del menor le habían solicitado 2 millones de pesos, mismos que al no poder juntar acudieron a la Fiscalía de Secuestros y Delitos de Alto Impacto (Fisdai).

Hasta el momento ni las autoridades, la Fisdai o la Fiscalía General del Estado (FGE) se han posicionado al respecto.