Por Abel Pérez

Ya está disponible el más reciente número de la revista literaria Filigramma, publicación del Círculo de Escritores Sabersinfin, y con ello siento otra vez ese tipo de alegría que tiene un no sé qué, porque no es comparable con el júbilo extremo, ni con el regocijo que ocasiona lo cotidiano. 

Se trata de una sensación que solo es ocasionada cuando una parte artística de nosotros queda plasmada en papel o en la superficie de una pantalla. 

Quienes hacemos posible Filigramma dejamos algo en este número catorce, y nos llevamos también algo. 

Evidentemente dejamos una porción de nuestra vida, literalmente, dejamos tiempo de nuestra existencia, es decir, somos más viejos cada vez que concluimos una edición. 

Si con cada publicación nos queda menos vida, ¿por qué lo hacemos? 

Lo hacemos por un poco de Luz, sí, por algo de esos rayos que penetran por la rendija de la caverna, la gruta de la célebre alegoría ideada por Platón para referirse a la ceguera provocada por la ignorancia. 

En ese contexto debe entenderse el título principal de la portada de Filigramma número 14: Escribiremos para que se haga la Luz

Escribimos para que se haga, en primera instancia, la Luz del saber en quienes participamos en la revista, y, en segundo momento, en un nivel de mayor pretensión, en nuestros lectores. 

Preferimos no pensar en que nos queda menos vida con cada edición, optamos por centrarnos en lo que nos llevamos. 

Nos quedamos con más –cierto saber–, en la medida que nos quedamos con menos –vida–. 

Inevitable filosofar de asuntos transcendentes, ejercicio que muy bien puede ser trasladado por cualquier persona a cualquier actividad de su trajín diario. 

Como adelanto de lo que encontrarán en Filigramma número 14, les comparto el breve editorial que escribí por tal motivo y les recuerdo que como ya es costumbre, la versión electrónica puede ser descargada gratuitamente en el siguiente enlace: https://bit.ly/3SNetl5 

Aquí el editorial: 

No estamos equivocados, son días aciagos e históricos los que estamos viviendo. 

Estallamiento de conflictos armados internacionales, irrupción de la inteligencia artificial en todos los ámbitos, replanteamiento de las relaciones humanas, en fin, todo eso y mucho más en su conjunto conforma la realidad trans y postpandemia.  

Frente a nosotros están emergiendo líneas de lo que será, al menos, el segundo cuarto del siglo XXI. 

Una mirada desde las alturas presagia un futuro inmediato poco halagüeño, lleno de nubarrones y más convulsiones. 

Quienes hacemos Filigramma estamos conscientes de lo anterior y muchas cosas más que a través de nuestras líneas anunciamos, presagiamos, denunciamos. 

Porque vemos la distancia entre las inercias, lo probable y lo esperanzador, entregamos convencidos nuestra obra al mundo; sabemos que otros más lo están haciendo en diferentes latitudes. Decimos que, por mínima que sea la contribución para mantener viva la llama de la esperanza, nada sería igual sin aportes como el nuestro. 

Sí, la posibilidad de una vida mejor no sería la misma sin la contribución de cada esfuerzo por muy modesto que sea. 

Por ello, otra edición más de Filigramma es un aviso de que seguimos de pie sin quitar el dedo del renglón. 

Para sintetizar lo aquí dicho, parafraseo el sentido con el que hila Álvaro Inostroza Bidart, nuestro escritor invitado, en su poema Mientras haya luz: escribiremos / aunque no haya luz / para que sea inevitable / que se haga la Luz. 

Hasta aquí la cita. 

Externo mi agradecimiento a todos y cada uno de quienes hicieron posible la publicación: Leticia Díaz Gama, Salvador Calva Morales, Filo, Huesca, Enrique Canchola Martínez, Jorge A. Rodríguez y Morgado, Olivia Sesma Rascón, Lilia Rivera, Alicia Flores, Macedonio Vidal, Esperanza Vera Mozo, Nicholas Gutiérrez Pulido, Luis Manuel Pimentel, Guillermo Axalco, Ariana Magaña, Martín Pérez Rojas “Mapero”, Luz Gabriela Balcázar Murueta, Elías Villalobos “Saile”, Álvaro Inostroza Bidart y el artista plástico invitado Jonathan Vásquez

Nuestro agradecimiento a los amables lectores, quienes nos animan con su retroalimentación a no desfallecer en el emprendimiento. 

Abel Pérez Rojas (abelpr5@hotmail.com) es escritor y educador permanente. Dirige Sabersinfin.com