De libros y más

«Podría sintetizar toda mi vida en un momento, en una imagen; es esta: tres mujeres con abrigos de lana oscuros esperan cogidas del brazo en un patio desolado. Están agotadas. Tienen polvo en los zapatos. Forman parte de una fila muy larga.

Las tres mujeres son mi madre, mi hermana Magda y yo. Es nuestro último momento juntas. No lo sabemos…».

En marzo de 1944, los nazis irrumpieron en un pequeño poblado húngaro en busca de judíos; fieles a su costumbre, los infames invasores, sembraron el terror entre los habitantes de Kassa. Entre las familias apresadas se encontraba la de Edith Eger, una joven de dieciséis años, cuyo talento para el baile y la gimnasia la había llevado a ser seleccionada para formar parte del equipo olímpico, sin embargo, debido a su origen judío se le impidió participar.

Edith y su familia fueron enviados al campo de exterminio de Auschwitz y en medio de las más terribles condiciones, el baile se convirtió en la herramienta que ayudó a la joven a sobrevivir y a encontrar la fuerza para sanar sus heridas.

Han transcurrido casi ochenta años desde la terrible noche en que Edith Eger fue llevada a Auschwitz; casi ocho décadas desde que sus padres fueron asesinados y su mundo quedó trastocado. Hoy, el poblado en que nació cambió de nombre, las fronteras de las naciones tomaron otras formas y el silencio se adueña de los terrenos en donde se levantaron los campos de exterminio. La joven bailarina no solo sobrevivió, sino que logró sanar sus heridas y ha dedicado su vida a ayudar a otras personas. Así es como Edith Eger, -Doctora en Psicología y profesora de la Universidad de California- decidió compartir sus vivencias en La bailarina de Auschwitz.

Desde su presentación, La bailarina de Auschwitz, encabeza la lista de los libros más leídos a nivel mundial; y aunque la historia que relata conlleva una gran carga emocional, no se centra en las trágicas experiencias de los campos de exterminio, sino que, más bien, esos sucesos dan la pauta para que la autora, a manera de novela, entreteja una bella historia de amor, fortaleza y reconciliación.

El nombre de Edith Eger, se ha convertido en sinónimo de resiliencia; esa capacidad para adaptarse a las circunstancias más adversas y salir avante quedan plasmadas en cada página de La bailarina de Auschwitz. El baile, no solo fue la herramienta que la ayudó a sobrevivir en el campo de exterminio, sino que además se convirtió en la fuerza que la impulsó hacia la libertad.

«Mientras bailo, se me ocurre un razonamiento que nunca he olvidado. Nunca sabré qué milagro me proporciona ese conocimiento. Me salvará la vida muchas veces, incluso después de que el horror haya acabado. Veo que el doctor Mengele, el avezado asesino que esta misma mañana ha asesinado a mi madre, da más lástima que yo. Yo soy libre en mi mente, cosa que él nunca será. Él tendrá que vivir para siempre con lo que ha hecho. Está más prisionero que yo…».

La bailarina de Auschwitz, es un bello y conmovedor relato, narrado con claridad y sencillez que resulta muy recomendable y que, definitivamente, seguirá encabezando las listas de ventas por mucho tiempo.

«La libertad reside en aceptar lo sucedido. La libertad significa armarnos de valor para desmantelar la prisión pieza a pieza».

 

 

Adriana Hernández Morales

 

Título: La bailarina de Auschwitz

Autora: Edith Eger

Editorial: Planeta

(También disponible en formato electrónico).

Mi correo: adrianahernandez1924@gmail.com


Adriana Hernández, es miembro del Club Nacional de Lectura Las Aureolas, club fundado por Alejandro Aura en 1995. Es además una mujer comprometida con las causas sociales, abogada de profesión y lectora por vocación.