La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha impuesto un nuevo y significativo paquete de sanciones a ocho ciudadanos mexicanos y doce empresas.

Estas acciones están directamente dirigidas contra la facción Los Chapitos del Cártel de Sinaloa, el cual es acusado de ser un proveedor clave de precursores químicos esenciales para la producción del fentanilo.

Se ha señalado que estas empresas, en su mayoría laboratorios químicos, eran controlados por “Los Chapitos” y desde ahí operan como centros de producción clandestina de fentanilo y otras drogas sintéticas que luego son convertidas en pastillas falsificadas y empaquetadas para su distribución internacional.

Entre los sancionados, se encuentran los hermanos Víctor Andrés, Francisco, Jorge Luis y María Gabriela Favela López, identificados como los propietarios de la empresa Sumilab.

Además, estas personas ya había recibido sanciones previas en 2023, incluso intentaron evadir las restricciones quitando la señalización de Sumilab y utilizando otras compañías fachada, como Agrolaren, Favelab y Storelab, para continuar con el suministro de químicos ilícitos.

Otras empresas sancionadas son: Comercial Viosma del Noroeste; Distribuidora de Productos y Servicios Viand; Favela Pro; Importaciones y Nacional Marcerlab; Prolimph Químicos en General; Proveedora de Servicios de Salud Mental del Pacífico; Qui Lab, S.A. de C.V. (Quilab) y Roco del Pacífico Inmobiliaria.

Como resultado directo de la OFAC, las sanciones conllevan serias consecuencias legales y financieras. Estas incluyen el bloqueo inmediato de todos los activos que las personas y empresas designadas puedan tener bajo jurisdicción estadounidense.

También tienen prohibido cualquier tipo de transacción con ciudadanos o empresas de Estados Unidos. Esta acción representa el segundo golpe de importancia contra el Cártel de Sinaloa en un corto periodo de tiempo, siguiendo las sanciones que ya habían sido impuestas previamente a la facción de Los Mayos.