La calificadora de riesgo Fitch Ratings mejoró la nota crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex), elevándola de “BB” a “BB+” tanto para el largo plazo en moneda local como extranjera, manteniendo una perspectiva estable.

Este ajuste resultó en el retiro de la Observación Positiva (RWP) de incumplimiento de emisor (IDR) que pesaba sobre la petrolera. Esta mejora en la calificación se debe a la exitosa ejecución de una oferta pública de adquisición por 9 mil 900 millones de dólares por parte de Pemex, un monto que fue financiado directamente con fondos del gobierno mexicano.

Fitch Ratings destacó que la clave para esta mejora fue el financiamiento gubernamental de la transacción.

La calificadora interpretó esta acción como un indicio de una mayor vinculación entre Pemex y el gobierno federal, lo que se tradujo en un aumento en la evaluación de Supervisión, Vinculación y Apoyo (OLS) de la compañía.

Esta señal de apoyo gubernamental más fuerte sugiere una menor probabilidad de que Pemex enfrente dificultades financieras sin la intervención del Estado.

Como resultado directo de esta reevaluación, la nota de Petróleos Mexicanos ahora se sitúa a solo un nivel por debajo de la calificación soberana de México, en contraste con los dos niveles de diferencia que existían previamente.