Se afirma que la del 2021 será la elección más grande en la historia de México. Hay, por tanto, quienes afirman que las más importante de todas. También por lo que está en disputa: arrebatarle el poder a Andrés Manuel López Obrador, que no es lo mismo que Morena.

Estarán convocados 95 millones de mexicanos para ejercer su voto. 5 millones más que en el 2018. Serán 164 mil 550 casillas, que suman 8 mil más que las que se instalaron en la última elección federal.

12 millones de mexicanos han sido convocados para ser funcionarios de casilla para lograr conjuntar a los mil 500 necesarios para cuidar la elección.

Como nunca en la historia, serán 21 mil cargos de elección popular los que estén en disputa y que serán definidos por los votantes.

Además, inédita la fusión de PRI, PAN y PRD, con la principal tarea de arrebatar el poder a quien se los arrebató (AMLO), y que intenta desterrarlos del ejercicio del mismo, después de 40 años de usufructuarlo.

El periodismo, la prensa, los medios, los periodistas, también, ahora más visible y notable que nunca, han pintado su raya y se suman a la disputa de manera abierta y sin cortapisas.

En ellos, los medios de comunicación, se puede leer en uno, que fulano de tal es el peor gobernador del País, ubicado en el lugar 32 y en otro, producto de la encuesta de otra empresa, ha escalado hasta el sitio 4 o 5.

La delincuencia, robos, violaciones, feminicidios, asaltos y demás son más o menos, en una ciudad o estado, dependiendo de la fuente.

Un político o candidato es débil, fuerte, creíble, tramposo, popular, malquerido, nefasto, confiable, dependiendo del medio que lo publique o con el cual el personaje tiene un acuerdo económico importante.

El periodismo también hace política. Y negocios.

Es cuánto.

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Luis Enrique Sanchez Fernández es periodista; ha escrito para impresos en papel, radio, televisión y portales digitales. Es universitario, historiador y cronista.