Las amenazas de Donald Trump de aumentar aranceles a los vehículos y otros productos podrían no surtir efecto entre las empresas automotrices quienes ya están realizando estudios para instalar plantas de producción de vehículos eléctricos.

De acuerdo con Miguel Martínez Madrid, coordinador de Ingeniería Vehicular del Instituto Mexicano del Transporte (IMT), representantes de una empresa canadiense y una estadounidense visitaron México hace un par de semanas para explorar la instalación de sus plantas de producción de vehículos eléctricos de transporte de pasajeros y de carga que utilizarían energía solar para su recarga.

La principal razón sería la posición geográfica de México que le permite recibir importantes cantidades de luz solar, toda vez que las electrolineras serían alimentadas con celdas solares.

Sin revelar la identidad de las empresas interesadas, aseguró que en caso de que se concrete la inversión, el anuncio oficial se haría en los meses subsiguientes.

“Quieren hacer la inversión para que los vehículos sean fabricados en México, utilizando tecnología que se desarrolle conjuntamente”, al tiempo que reveló que Quintana Roo se ha convertido en su principal interés, por la cantidad de sol.

También para transporte urbano

El especialista destacó que las empresas ya se han acercado incluso con los gobiernos locales, pues ven en el transporte urbano y de pasajeros, así como los metrobuses uno de los que tiene mayor potencial, pues una recarga le daría a los vehículos autonomía para recorrer 400 kilómentos, el tramo similar al que existe entre Cuernavaca y la Ciudad de México.

“México tiene una cantidad enorme de sol; entonces, ellos quieren poner en las terminales de autobuses, por ejemplo, grandes espacios con celdas fotovoltaicas en donde estarían cargándose siempre las baterías. Entonces, llegaría el camión a que le cambiaran las baterías por unas ya cargadas, que estarían almacenadas para evitar largos tiempos de espera”, refirió.