Tras el suicidio de Juan Lorenzo, un pequeño de 7 años que fue víctima de acoso escolar en su primaria, en Zacatlán, en el Congreso del Estado se propuso sancionar hasta con cinco años de prisión a los directivos y profesores que inciten actos de bullying en las escuelas de Puebla.

Pero además, también se contemplan sanciones para los menores responsables de violentar física o psicológicamente a la víctima de bullying, quienes serán acreedores de una multa de hasta 2 mil pesos.

Esa es la propuesta del diputado morenista Roberto Zataraín Leal, que consiste en reformar el Código Penal para imponer multa de 22 mil 628 pesos a 56 mil 570 pesos, pago de la reparación del daño y prisión de uno a dos años al profesor, directivo o autoridad que cause, permita o aliente la violencia física o psicológica a un estudiante.

También se establece la suspensión temporal, inhabilitación o destitución de los directivos, docentes o autoridades administrativas que sean omisos ante denuncias o quejas sobre bullying al interior de las instituciones educativas.

Pero, si la situación de acoso culmina en el suicidio o la pérdida de la vida de la víctima, la sanción contra el educador será prisión por de dos a cinco años.

También se les impondrá de seis meses a un año de prisión por no tomar las medidas en cuanto tenga conocimiento de algún hecho de acoso escolar, cuando este produjera el suicidio o la muerte de un menor de edad.

En caso de que la violencia la realice, incite o permita un profesor, directivo o autoridad escolar, se dará vista a la Fiscalía General del Estado (FGE).

Estudiantes también

Las sanciones alcanzarán también a los estudiantes acosadores quienes deberán enfrentar hasta la cancelación de su matrícula.

Para poder sancionar a los estudiantes, propuso reformar la Ley de Seguridad Integral Escolar para establecer un programa de seguimiento psicológico, trabajo social e imponer multa de una a 20 Unidades de Medida y Actualización (UMA), que va de 113.14 pesos a 2 mil 262.8 pesos al estudiante que cause violencia física o psicológica a su compañero.

Además deberá hacerse una reparación del daño y al agresor o agresores se les cancelará la matrícula y serán reubicados de escuela.