El Mayo Francés fue el detonante para iniciar un movimiento que a nivel mundial tenía condiciones para estallar. 1968 el año que da inicio a la nueva universidad.

La Universidad que abandona las cuatro paredes de sus edificios, que no solo se preocupa por las clases y los libros, que entiende que su papel, que su función, está más al lado de los los desposeídos, de los explotados y no con el poder que domina y corrompe.

VietNam, la igualdad de hombres y mujeres, los problemas sindicales, la situación de los desposeídos, caracterizaron al Mayo Francés.

Pero fue el inicio. En México el 2 de Octubre se manifiestan, por la convocatoria del Consejo Nacional de Huelga, estudiantes de la UNAM y del IPN, para luchar contra la represión en contra de alumnos y profesores.

Puebla tuvo su sitio en el despertar del movimiento estudiantil. 1973 fue la culminación de 13 años de lucha iniciada en 1961.

La Universidad ligada a las demandas del movimiento obrero, interesada en los problemas de la clase necesitada y las necesidades de la población.

Al mismo tiempo, la eterna lucha entre liberales y conservadores, que caracteriza a la sociedad de Puebla desde su fundación, había encontrado su mejor expresión en la Universidad Autónoma de Puebla.

La Puebla de Zaragoza versus la Puebla de los Ángeles, encontraba desde la década de los 50’s su mejor expresión en la Universidad Autónoma de Puebla.

Vietnam en París, Cuba en Puebla.

Y el gobierno limitado, en París, México y Puebla, entre varios otros casos, no encontró mejor solución que la persecución, la agresión  y la matanza.

No bastaron los asesinatos de Joel Arriaga y Enrique Cabrera, para frenar el despertar universitario.

Los conservadores entendieron desde años antes que la Universidad había despertado y después de varios años de esfuerzos, inauguraban el 8 de mayo de 1973 su Universidad, La Universidad Popular de Puebla.

El gobierno represor de Gonzalo Bautista O’Farril, no.

Y el 1º. de mayo de 1973, en una velada agresión que está documentada en escritos e imágenes, ordenó, sin duda desde el gobierno de Puebla, la matanza de cuatro universitarios y varios heridos, con tiradores profesionales desde los edificios que rodean el Edificio Carolino.

Su salida del gobierno de Puebla, el 8 de mayo de ese año, no ha sido suficiente para limar, suavizar, reconocer y perdonar la agresión en contra de la UNIVERSIDAD.

Es cuanto.

Mis contactos digitales:

@luisenriquesf
facebook.com/luisenrique.sanchezfernandez
facebook.com/luisenriquesf
instagram.com/Luisenriquesf
luisenriqueph051@gmail.com


Luis Enrique Sánchez Fernández es periodista; ha escrito para impresos en papel, radio, televisión y portales digitales. Es universitario, historiador y cronista.