El panorama financiero para los nacidos después de 1985 no es muy alentador, pues de acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), se prevé que el 41 por ciento, de los ahora jóvenes vivirá en la pobreza al llegar a la vejez.

Basados en un análisis de riesgos la AMIS advierte que gran parte de la población vivirá hasta cumplir entre 82 y 84 años de edad, es decir tras pensionarse a los 65 años deberá asumir gastos durante 17 o 19 años más.

El estudio “Administración de Riesgos Públicos para la Población Adulta”, también advierte que tal panorama se relaciona con un “rápido envejecimiento” aunado al aumento en la esperanza de vida.

De él se desprende que el 64 por ciento de las personas nacidas después de 1985, además, pertenecerá al estrato socioeconómico medio o bajo y además deberá seguir trabajando para subsistir o mantener a su familia.

Referente a su patrimonio la “buena noticia” es que el 57 por ciento será dueño de su propia casa, sin embargo el 57.4 por ciento estará expuesto ante el riesgo a desastres naturales.

Freelancers, los más afectados

El grupo más afectado se encuentra entre quienes han pasado gran parte de su vida laboral como freelancers, los que pertenecen al sector informal o los que hayan cotizado poco tiempo en el IMSS.

Por ello la recomendación es clara: los jóvenes de menos de 33 años están en una carrera contrarreloj para iniciar a planear su futuro a través del ahorro voluntario.

Su plan de protección financiera también deberá considerar el aspecto de la salud, el cual para 2050 –de acuerdo a estimaciones- podría hacer colapsar al sector público sanitario, pues al existir una mayor cantidad de adultos mayores, también conllevan la atención de los problemas de salud inherentes a su edad.

Con información de Plumas Atómicas