Al menos nueve entidades los reportes de escasez de gasolina en las estaciones de servicio, continúan aumentando, luego de que la nueva política de Andrés Manuel López Obrador para combatir el robo de hidrocarburos provocara el cierre de ductos.
Los estados en los que se ha reportado el desabasto es Guanajuato, donde en nueve municipios se reportan compras de pánico; Guadalajara, siendo Zapopan el municipio donde se ha complicado el patrullaje de policías pues las unidades no tienen gasolina.
Querétaro es otro de los estados dónde hasta el momento se han cerrado por lo menos 65 estaciones; Pachuca donde hay cerradas estaciones en Tizayuca y Actopan.
Estado de México, donde gasolineras en el Valle de Toluca reportaron desabasto desde el inicio del año, así como Ocoyoacac, San Mateo Atenco, la zona sur del Estado de México, Valle de Bravo, Temascaltepec y Tejupilco por mencionar algunas.
En Puebla la situación ya afectó a los municipios de Tepeaca, Acatzingo y Tecamachalco, todos ellos pertenecientes al triángulo rojo, situación similar comienza a gestarse en el municipio de Parras de la Fuente, Coahuila, donde ya hay largas filas no solo de vehículos, también de consumidores que llegaban con alguna garrafa para su consumo.
En Monterrey varias estaciones han alertado del desabasto de combustible Premium, mientras que Morelia ha sufrido el desabasto desde la última semana de diciembre.
A pesar del desabasto, Pemex ha informado que no existe un estimado de cuándo se regularizará el servicio.
Desde este viernes, López Obrador ha pedido calma a la población y calificó la escasez como focalizada en algunos puntos, reafirmando que se debía a un “reacomodo”.
También aseguró que el desabasto no tiene que ver con el robo de combustible, sino con la complicación que se dio para el traslado del mismo, pues fue por pipas y no por ductos.
Como se están dando estos cambios puede ser que haya en algunos puntos desabasto, pero se está atendiendo y pido a los ciudadanos la comprensión y el apoyo. Estamos procurando que se resuelva pronto.
Cabe recordar que el robo de hidrocarburos en el país generó pérdidas de cerca de 66 mil 300 millones de pesos tan sólo en 2018.
