Karen Jurado
Tras el anuncio de China de cancelar todos los eventos deportivos hasta que se controle la infección del Coronavirus, se pone en riesgo el Gran Premio de China de la Fórmula 1, a celebrarse en el mes de abril.
Hasta ahora no se ha suspendido oficialmente por lo que se buscará reprogramarla, según anunció Ross Brawn, director de operaciones deportivas.
Quienes pueden suspenderla oficialmente son las autoridades chinas, pero el plazo logístico se está agotando ya que en una o dos semanas se estaría enviando el equipo por flete marítimo además de personal para ir preparando la carrera, que llega a ascender hasta 5 mil personas dentro de las próximas semanas.
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En cuanto a lo económico, se llega a pagar hasta 40 millones de euros por carrera, por lo que la cancelación implicaría grandes pérdidas. Sin contar los gastos que ya se hicieron en boletaje, patrocinios, publicidad y mercadotecnia.
Una opción sería intercambiar la fecha con la de otra carrera, pero tiene que ser dentro del calendario ya que no se aceptaría que se alargara la temporada.
