Al colocarse como la segunda entidad con más contagios y decesos por COVID-19 en cárceles, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) urgió al gobierno de Puebla a reforzar las medidas sanitarias en los centros penitenciarios para evitar el rebrote.

Así se advierte en la misiva enviada al titular del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social de la Secretaría de Seguridad Protección Ciudadana (SSPC), José Ángel Ávila en la que pide adoptar las medidas cautelares pertinentes.

Entre las medidas solicitadas se encuentra dotar de productos sanitarios y de desinfección a los reclusos; garantizarles la comunicación con sus familiares en el exterior vía telefónica o cualquier otro medio, y que se dispongan unidades médicas y hospitalarias para su atención oportuna.

En ese tenor destaca Puebla por ser la segunda entidad con el mayor número de internos contagiados, con 292, solo por debajo de la Ciudad de México que tiene 3 mil 333.

El organismo también insiste a las autoridades analizar los procesos que enfrentan reclusos en situación de riesgo por sus condiciones de salud, edad avanzada, embarazo o al cuidado de sus hijos menores de edad para que accedan a alguno de los beneficios de preliberación, acción que también ya se lleva a cabo en el estado.

También sugiere al Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social de la Secretaría de Seguridad Protección Ciudadana (SSPC) diseñe y ejecute un plan de despresurización de los centros penitenciarios del país.