El Banco de México (Banxico) redujo a 0.1% su estimación media de crecimiento para el Producto Interno Bruto (PIB) de este año, una reducción del 0.5 puntos, en comparación con el 0.6% que proyectaron en febrero.

El nuevo pronóstico, incorporado en su Informe Trimestral, considera que la economía podría registrar un desempeño que fluctuaría entre -0.5% y 0.7 por ciento.

También bajaron las expectativas para el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2026, del 1.8% al 0.9%.

En cuanto a la inflación, Banxico mantuvo su expectativa para el cierre de año en 3.3%, y elevó la inflación subyacente a 3.4%, una décima más que la proyección de finales del año pasado.

De acuerdo con Victoria Rodríguez Ceja, gobernadora del Banco de México y los subgobernadores Jonathan Heath y Gabriel Cuadra, los nuevos pronósticos del PIB para 2025 no corresponden a la definición de una recesión.

Rodríguez Ceja mencionó que se prevé “atonía para la actividad económica en este año, pero no se trata de una recesión”.

“Se ha observado un debilitamiento de la economía por varios trimestres, persiste la debilidad y esto se está dando en un entorno complejo donde la incertidumbre por las medidas arancelarias podría haber afectado el comportamiento de los agentes económicos en este periodo e incidir en las decisiones que toman de inversión y consumo”, indicó.

En tanto, el subgobernador Heath señaló que las condiciones cíclicas de la economía no muestran que estamos cerca de una recesión.

“No estamos necesariamente cerca de una recesión (…) la economía por ahora está estancada; aparentemente puede seguir estancada por un rato y ojalá que empiece a revivir un poco pero realmente no estamos ahorita en una recesión”, mencionó.

Mientras, el subgobernador Cuadra explicó que estancamiento actual sería resultado de la desceleración económica que se presentó en el 2024.

“Ahora en el 2025 estamos estimando un comportamiento cercano a cero, con una economía estancada y un balance de riesgos a la baja donde el posible resultado podría ser una contracción mayor”.

Ceja Rodríguez también indicó que las nuevas previsiones para el PIB consideran un debilitamiento de la economía de Estados Unidos, consecuencia de los aranceles así como el efecto de la consolidación fiscal que está presentándose en México.

Están anticipando que la imposición de aranceles puede debilitar también a la economía de Estados Unidos, lo que a su vez tendría una incidencia en una menor demanda por exportaciones mexicanas, situación que significaría un impacto importante, en espacial para México que destina más del 80% de sus exportaciones a Estados Unidos, representando cerca del 26% del PIB.